En las llamadas redes sociales (redes digitales de publicación social de información) se han seguido suscitando infinidad de comentarios y consecuente discusión inherente a los resultados estrepitosos que en materia deportiva tuvo el equipo que portó la franela de México en la sexagésima edición de la Serie del Caribe, el más importante certamen beisbolero latinoamericano en el que anualmente se disputan la supremacía conjuntos representativos de las naciones integrantes de la Confederación de Beisbol Profesional del Caribe (CBPC) que son República Dominicana, Venezuela, Puerto Rico y México, así como Cuba que es el país que sin ser integrante de esa organización es invitado tradicionalmente, agrupación caribeña que es encabezada por el dominicano Juan Francisco Puello y cuyos 13 cotejos correspondientes a esta última edición se desahogaron en el estadio de beisbol que es la casa de los Charros de Jalisco, entre los días 2 y 8 de febrero de 2018, recordando que no obstante le tocaba efectuar el evento en este año a la Liga Venezolana más por las circunstancias complicadas que en el ámbito socio político y económico privan en esa República se negoció con la Liga Mexicana del Pacífico (LMP), que preside el sonorense Omar Canizales, y con la directiva de los albiazules jaliscienses que encabezan el presidente del Consejo de Administración Salvador Ramiro Quirarte Villaseñor, así como el presidente del Club Deportivo Armando Navarro Peña, a efecto de cambiar las fechas a fin que en este año se realizase en Jalisco y el próximo en Venezuela.A poco más de dos semanas que culminó el serial caribeño y por los lamentables resultados que en lo deportivo cosechó México, es válido decir que el grupo de peloteros que formaron el roster de México, así como el mánager Omar Benjamín Gil y el cuerpo técnico de apoyó, sólo portó la casaca mexicana, ya que sería una gran ironía afirmar que el grupo de beisbolistas defendieron la camiseta tricolor, ya que de plano no hubo defensa de ella.Se han suscitado diversos señalamientos cruzados entre lo dicho por Benjamín Gil, quien fue el mánager del equipo mexicano, y lo expresado por el presidente de LMP, Omar Canizales, pues el timonel asegura que prácticamente no tuvo oportunidad de intervenir en el armado del roster ya que simplemente se lo impusieron desde la presidencia de la LMP, en tanto que Canizales asegura que el equipo se integró en su mayor parte en base a lo determinado por Gil y la presión que al respecto hicieran los directivos de los Tomateros de Culiacán, que encabeza Héctor Ley,para fortalecer las decisiones del piloto y exigir se cumplieran en lo más posible e imperaran así las designaciones y omisiones para integrar el listado de nominados en base a los caprichos, filias y fobias del mánager y los dirigentes de la organización culichi.Es interesante comentar lo que muchas voces de aficionados, así como periodistas deportivos especializados en beisbol que colaboran en diversos medios electrónicos e impresos con influencia en México y Jalisco han expresado en cuanto a cuál pudo haber sido el equipo ideal que hubiere representado al máximo beisbol profesional mexicano jugándose en el invierno.Para guarecer la primera almohadilla y además desempeñarse en forma indistinta o alternada como poderosos toleteros en calidad de bateador designado por el pítcher se ha mencionado a Joey Meneses, de Tomateros de Culiacán, y a Jesús “Jesse” Castillo, de los Mayos de Navojoa —en este orden de ideas estaría excluido el pelotero de los Charros de Jalisco, Japhet Amador—; como titular de la segunda base es mencionado como la mejor opción el capitán de Charros José Manuel “Many” Rodríguez Espinoza —que no fue convocado en esta citada última edición al haber sido vetado por Benjamín Gil— y como buen respaldo a Diego Madero, de Navojoa, quien tampoco fue considerado por Gil y los hermanos Ley, y en este criterio debieren quedar excluidos Fernando Pérez y Alfredo Amezaga, de Culiacán, a quienes se empecinó el tal Gil en concitar y fueron inútiles en cuanto a valía; como guardianes de las paradas cortas se señalan de excelente opción a Paul León, de Navojoa, y Amadeo Zazueta, de Charros, hubiendo en tal caso omitido a Issmael Salas, de Tomateros; y para cubrir la antesala la mención es a favor de Agustín Murillo Pineda, de Charros, y Walter Ibarra, de Águilas de Mexicali, excluyendo entonces a Ronier Mustelier, quien siendo un gran camarero, es sabido estaba menoscabado de salud por lesión en piernas.Para cubrir la receptoría el comentario es en cuanto a que fue adecuada elección la hecha en favor de Gabriel Gutiérrez, de Jalisco, y Sebastian Valle, de Cañeros de Los Mochis, ya que no se pudo contar con Román Alí Solís, de Culiacán, por deber reportarse a campamento de Ligas Mayores.En cuanto a los outfielders o jardineros, los comentarios son a favor de Sebastian Elizalde, de Culiacán, Chris Roberson, de Mexicali, Alejandro González, de Mayos y Yordanis Linares, de Charros, y en este orden de ideas debió dejarse descansar a Rico Noel en razón de no estar en perfecta forma física por lesión. En cuanto a los serpentineros la mención es para: Tyler Alexander, Will Oliver y Sergio Romo, de Charros de Jalisco, Edgar González, Anthony Vásques y Aldo Montes, de Tomateros, Carlos Bustamante, Isidro Márquez, Esteban Haro, Daniel Moskos y Eddie Gamboa, de Navojoa, Barry Enright, de Naranjeros de Hermosillo, Sergio Mitre, de Águilas, no debiendo haber convocado entre otros a Héctor Daniel Rodríguez, Jesús Castillo Montaño y Casey Coleman, de Culiacán, Rolando Valdez, de Mexicali y Nick Struck, de Venados de Mazatlán.@salvadorcosio1bambinazos61@gmail.com