Charles Louis de Secondat (el Barón de Montesquieu), filósofo, jurista y ensayista francés se le reconoce por sus teorías sobre la ‘separación de poderes’ que han sido incluida en las constituciones de varios países. Montesquieu sostenía que “todo hombre que tiene poder se inclina a abusar del mismo. Para que no se pueda abusar del poder hace falta que el poder detenga el poder…De este modo, se confía la vigilancia de los tres poderes entre ellos mismo y detiene los excesos...”.México se rige bajo marco constitucional de la división de poderes, pero aparentemente es una separación muy frágil -que se puede resquebrajar- o es ficticia -porque predomina uno de ellos-.El reporte que sobre el extinto aeropuerto de Texcoco emitió la Auditoría Superior de la Federación (ASF) demostró que la presión ejercida desde Palacio Nacional (Poder Ejecutivo) sobre la Cámara de Diputados (Poder Legislativo) motivó la revisión de la conclusión y que este lunes se presente a comparecer al titular de la dependencia (David Colmenares Páramo) ante la Comisión de Vigilancia del recinto porque supuestamente el presidente tiene “otros datos”.La presidencia tiene todo el derecho de pedir una verificación sobre los excesos que generó la suspensión del aeropuerto, pero sin tantos aspavientos y acusaciones lanzadas al aire a diferentes sectores de la sociedad y a los medios de comunicación. Aunque el asunto hace ruido, más que por el asunto de las indemnizaciones, por la clara intención desde Palacio Nacional de la intención de revisar la operacionalidad de los organismos autónomos del país, como es el caso de la ASF y en algunos casos desaparecerlos. Desde principios de año se han levantado muchas voces en el Congreso advirtiendo sobre “La amenaza a las instituciones que tienen autonomía constitucional, para evitar la transparencia y la rendición de cuentas”, dijo recientemente la Senadora Kenia López Rabadán del Partido Acción Nacional (PAN).En medio de la contienda aparecieron los medios de comunicación que resultaron ser ‘los villanos’ de la película, contra los que el presidente arremetió cuando dijo que “antes callaban como momias y ahora gritan como pregoneros”, pidiendo a los dueños de los mismos “que pongan por delante la ética y no se engañe, no se manipule…”Los medios simplemente difundieron una información oficial de un órgano constitucional que desafortunadamente mostraba “otros datos” que tenía la presidencia. Peor hubiera sido que ante el revelador despilfarro que supuestamente sucedió, se callara y se diera la impresión que se encubrieron los hechos.En el escenario de la discusión se concluye, el golpe que se le da a un organismo autónomo e independiente, la autoridad que hay de un poder sobre otro y la disyuntiva de la prensa. ¿Usted, qué opina?
