Este año sí se pudo realizar el torneo nacional de arcilla, en nuestro Estado, como en muchos años atrás se venía desarrollando. Es uno de los eventos más importantes a nivel nacional y las razones son varias. La primera es por las hermosas instalaciones en donde se realizan, que en este año tocó en el Hacienda San Javier, Atlas Colomos, Atlas Chapalita, Privado San Javier y en Polideportivo Metropolitano. La otra razón es por la buena organización y por todas las atenciones que se tienen por parte de cada una de las instituciones. En esta ocasión el torneo fue diferente desde el comienzo. Debido a la pandemia, se tomaron medidas estrictas con los jugadores, padres y entrenadores, todos sin excepción tuvieron que hacerse la prueba del COVID y si alguno diera positivo no jugaría el torneo. También dentro del club existía control por parte de los directores de cada institución en que usaran cubreboca y que se mantuviera la distancia; los entrenadores que acataron las reglas demostraron ser verdaderos profesionales, desgraciadamente uno no lo entendió. Sobre los resultados, Jalisco se destacó en singles femenil en una categoría y en hombres dos categorías. Sin duda es un tema para reflexionar y ver qué se está haciendo en cancha, ya que Jalisco siempre aprovechó mucho el hecho de ser local, pero los resultados dijeron otra cosa. Finalizó este torneo y los jugadores de Jalisco tienen la oportunidad de jugar dos torneos en la misma semana, el primero para obtener un wildcard al J2 del Country Club, además de la calificación y desde el 16 de este mismo mes comenzará el draw principal de este certamen. Esperemos que con este gran apoyo por parte de la Asociación de Tenis de Jalisco los jugadores lleguen muy bien a este próximo evento.
