Cuentan que poco antes de la definición de las candidaturas municipales del partido Movimiento Ciudadano (MC), en especial la de Guadalajara, el aún diputado federal emecista Salvador Caro Cabrera se acercó al gobernador Enrique Alfaro para explorar qué tanto contaba con su apoyo para lograr esa añeja aspiración de ser candidato a la alcaldía tapatía. La búsqueda de este respaldo se fincaba en la amistad que ambos forjaron desde sus tiempos de juventud en el PRI, y por cómo se consolidaron esos lazos afectivos en el momento que Caro se convirtió en el comisario de Seguridad Pública cuando Alfaro ganó en el 2015 la presidencia municipal de Guadalajara, y lo mantuvo ahí contra viento y marea, incluso pese a los contratiempos que tuvo para acreditar los exámenes de control y confianza. Ya como gobernador, Caro fue el líder de la bancada naranja en el Congreso del Estado, hasta ahora que tal vez cumpla su última misión en ese partido como legislador federal. La primera respuesta de su amigo el mandatario estatal fue que él, con su retiro de la vida político electoral y de MC que anunció desde julio del año pasado, había dejado todo en manos del dirigente nacional Dante Delgado, y del candidato a la gubernatura, Pablo Lemus, por lo que tendría que ir a tocar esas puertas para ver cualquier asunto relacionado con las candidaturas.Luego vino un segundo consejo, cuando Alfaro le recomendó a Caro que lo mejor sería, como él lo había decidido luego de no obtener la candidatura presidencial de MC, que también se jubilara de la política. Ese diálogo desconcertante para él, junto con la designación de Verónica Delgadillo como la abanderada emecista para la alcaldía de la capital jalisciense, y el sondeo realizado con su equipo donde se determinó no apoyar esa candidatura, hicieron que Caro buscara los caminos para llegar con la dirigencia nacional y la candidata presidencial de Morena y aliados.La ruta la encontró con su también ex aliada política en el PRI, y ahora candidata del Verde, en alianza con Morena, PT, Hagamos y Futuro a la gubernatura de Jalisco, Claudia Delgadillo, que desde fines del año pasado le consiguió una cita tanto con Mario Delgado como con Claudia Sheinbaum.Lo acordado fue que lo incluirían de último momento en las mediciones, donde figuran ya Mariana Fernández, María Padilla y “Chema” Martínez, de Morena, pero también Mara Robles y Tonatiuh Bravo, de Hagamos.Habrá que ver cómo sale en las encuestas y si eventualmente en Morena acceden a jugar con un emecista que recién decidió dejar las filas naranjas, apelando a la máxima de que para que la cuña apriete, debe ser del mismo palo.jbarrera4r@gmail.com
