1. El Tercer Grupo montó, en el contexto de su taller, la pequeña pieza “Un hogar sólido”, que termina funciones este fin de semana (viernes y sábado 20:00 horas, domingo 19:00 horas, en su combativo foro de Calzada del Ejército 226 A, entre Medrano y Revolución). El texto es uno de ésos que fascinan a los estudiantes de teatro cuando descubren a la brillante Elena Garro, una especie de broma amarga y melancólica sobre la muerte y el paso del tiempo. ¿Cómo se leerá esta obra hoy, cuando lo costumbrista debe enfrentar la breve paciencia de los espectadores, cuando parece que nomás huele a viejo antes de que tenga oportunidad de mostrar toda su vigencia? Más que teatro “de época”, necesitamos un teatro que nos ayude a reconocernos en las formas que nos son ajenas.2. En este espacio se ha hablado varias veces de “Juana Inés, paráfrasis de sí misma”, el collage que Teatro Nómada y Teatro Estudio lograron en torno a la hipótesis de que sor Juana es útil (“pertinente”, según el único adjetivo que se le ocurre a muchos artistas) para leer las grandes disputas de género de nuestro siglo; está en temporada hasta octubre en el Teatro Experimental, todos los fines de semana. La hipótesis era una obviedad: es obvio que sor Juana no conoce de épocas. Sí hay que decir que la “Juana Inés” tapatía es divertida, entretenida y hasta atractiva en varios momentos; sobre todo destacan las primeras imágenes: un cuerpo desnudo que denuncia nuestra cavernícola distinción entre lo femenino y lo masculino. Ahora bien: juntar muchas imágenes, ¿produce necesariamente alguna inteligente? ¿Hay que adornar a sor Juana para que revele su vigencia en cuanto a la violencia de género?3. Este viernes 28 se despide durante un rato el monólogo que Eduardo Villalpando presenta en su Taller de Penitenciaría y Prisciliano Sánchez: “Quien lo probó lo sabe”, un texto del argentino Mariano Moro sobre un Lope de Vega resucitado que reflexiona sobre su vida, sus enemigos y sus amores. ¿No da una curiosa risa que “El Fénix de los Ingenios” al final lamente escribir teatro, se queje de los actores, reniegue de la vida de los escenarios? Sobre todo da risa que no lo admite sino hasta después de muerto; bien vivos, los teatreros no saben parar, dejar de actuar o de dirigir o de meterse a proyectos nuevos. Y así tenemos en Guadalajara, por ejemplo, una escena teatral diversa, abundante en nuevas ideas, que usted podría disfrutar mucho .Apostillas. Ya da igual que el Partido Encuentro Social encabece una comisión legislativa de cultura: históricamente, lo que los diputados y senadores hacen con el dinero público está más allá del interés de cualquier ciudadano. Los artistas sí que podrían fungir como contrapesos: es la hora de asumir el reclamo de trabajar en redes ciudadanas que no dependan de las estructuras políticas, que sirvan para acotar la acción de gobernantes y representantes. Cierto, habrá menos cocteles e inauguraciones, pero el trabajo del artista servirá a quienes lo necesitan. Y lo necesitamos mucho.Cartelera y más preguntas: agoragdl.com.mx / ivangonzalezvega@gmail.com