Varios se preguntan en dónde está Chuy Medina, líder de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), ahora que surgieron señalamientos de acoso sexual en la comunidad universitaria.Ni un mensaje en redes sociales, ninguna movilización o condena pública, ni una muestra de apoyo a las víctimas.Mientras otros temas “políticamente convenientes” como los desaparecidos los abandera con pasión, cuando no se trata de la paja en el ojo ajeno sino de la viga en el propio, ¿mejor se queda calladito?***Transcurrido un mes de campaña finalmente la diputada priista Liliana Morones se animó a solicitar licencia al cargo.La legisladora que quiere reelegirse ha brillado por su ausencia en el Congreso local durante las últimas semanas y cuando restan unos días de proselitismo ya decidió dejar de cobrar y hacer campaña.Falta ver si la bancada priista llama a su suplente o deciden dejar el espacio vacío, lo cual tampoco haría mucha diferencia con el “trabajo” de la diputada.***Parece que Raúl Juárez Cisneros, líder nacional del PRI, no quiso, no pudo o simplemente se le olvidó que durante su visita a Guadalajara el anfitrión era Miguel Castro Reynoso, candidato del PRI al Gobierno de Jalisco.Lo decimos porque ante reiterados cuestionamientos sobre el escenario a nivel estatal, varias veces evadió responder para remarcar que José Antonio Meade era un gran candidato.Hasta que se le insistió reparó en que el ex titular de la Sedis era un “gran contendiente”.¿De plano los priistas perdieron el rumbo que ya ni entre ellos se reconocen?***Rumores desde los pasillos del Congreso llegaron a esta H. Fuente acerca de que la bancada de Movimiento Ciudadano le está coqueteando a una diputada suplente del PRI.Aunque todavía no hay un “sí, acepto” de por medio, ese escenario le daría 14 votos seguros a los emecistas.Por eso cuentan que el sheriff legislativo, Salvador Caro, está en negociaciones con Susana Pérez, que apenas hace unas semanas llegó a la curul como suplente pluri priista.Si cuajan las negociaciones, la legisladora podría seguir el camino de Eduardo Pulido quien apenas llegó de bateador emergente y dejó la camisa tricolor para pintarse de naranja.