Lo cierto es que esta vida, no se las otras que no he vivido pero ésta es muy burlesca, nuestro desaparecido amigo Guillermo García Oropeza, entre otras frases célebres dejo dicho que nuestro país no es un país serio, lo cual es una verdad del tamaño del universo, aunque todos los expertos no quieran verlo así, observe usted si no.Vale máquina los deseos y propósitos que usted tenga, la vida se encargara de mofarse de ti. Jean Paul Sartre a quien nunca he leído ni pretenderé leer jamás, pero que un día nos tocó tomarnos un café en el mismo sitio, aunque ni me peló, ni me hizo caso pero que algo se debe haber pegado, debe haber escrito, porque dicen que era muy amargoso para escribir que esta vida es una mierda, no coincido con el, ni tengo por que demonios haber coincidido con él, salvo que él haya opinado que la vida es burlesca.Diga si no, somos un país gobernado por el estadista más grande que la humanidad haya conocido y hay muchos que parecen no enterarse y que al mismo tiempo en nuestro Estado viva el estadista más grande que con excepción del antes mencionado y que aquí la humanidad local haya conocido, pero que es claro que las gallinas de arriba cagan a las de abajo y que las protestas justas y valientes de nuestro tlatoani local, cuando llegan a la capirucha se disminuyen y no se oyen. El hecho es que en temas como la seguridad no tienen idea de cómo solucionarse ni en lo federal ni en lo estatal ni en lo municipal, aunque el jerarca local ha anunciado con bombo y platillo que disminuyó en 200% el robo de sombreros tiroleses, pero en lo demás sus gentes no tienen idea de cómo disminuir los otros delitos, pero hay que dejar que crean que están haciendo algo más que gastarse entre ellos sus barberos el muy generoso presupuesto de que disponen que para eso sí son buenos.Por mi parte tengo toda mi vida con tres propósitos de año nuevo: No dejar de comer, no dejar de beber y no dejar de fumar, pero el transcurso de la vida ha hecho que por la edad ya no puedo gozar los dos primeros en plenitud y la fumada recibí la imperativa orden por parte de mi amada esposa, lo que me hizo recordar que mi abuela decía que si tu mujer te ordena que te avientes de tejas para abajo, mídele, porque de seguro te vas a lanzar y obedecer es fácil.Pero iniciar el año es siempre un motivo de esperanza y buenos deseos. Alejandro Magno antes de entrar en batalla repartió todos sus bienes y cuando alguien le preguntó qué haría sin bienes y el gran conquistador le contestó “yo me quedo con la esperanza” y como al conquistador se las deseo a mi amable lector. @enrigue_zuloaga