Hacer un noticiario de radio en Guadalajara es fascinante. Y aleccionador, y más en estos días.Con la activación del Botón de Emergencia y el intento de inhibir la movilidad del ocio en la capital de Jalisco, en los últimos días en el programa hemos recibido cantidad de mensajes del auditorio girando más o menos alrededor de los mismos temas: el enojo de los choferes de Uber que se sienten maltratados porque se les prohíbe trabajar por las noches y fines de semana mientras los taxis amarillos sí lo pueden hacer; las quejas porque los taxis amarillos cobran lo que se les antoja aplicando precios exorbitantes en sus viajes; miles de personas que llegan tarde a sus trabajados y de regreso a su casas por las restricciones en los horarios del transporte público, comerciantes que se quejan por las bajas en sus ventas…Hasta que nos llega un mensaje de una señora que nos regresa a la verdadera realidad de la pandemia:Señor Latapí, la merma que yo he tenido es de familiares, en menos de un mes murieron mi padre y me hermano.Y es que parece que se nos había olvidado que coronavirus lo que cobra todos los días son vidas (un promedio de 29 diarias en la última semana) y cientos de contagios nuevos (780 diarios en el mismo periodo).Ese es el punto: hablamos de vidas humanas.Y la inexplicable realidad es que el tema parece relegarse para poner en primer plano otras cuestiones.Es tan claro como que mientras el virus siga propagándose como hasta ahora, y cobrando vidas irrecuperables, es ocioso hablar de pérdida de ingresos, familias que ganan menos que antes, grillas políticas, alianzas federalistas, etcétera.El tema debería ser de prioridad máxima para nosotros y para las autoridades; nosotros con la conciencia y responsabilidad de que lo que está en juego son nuestras vidas y las de nuestros seres cercanos, y las autoridades en que si no se saca adelante esta crisis (y se saca bien) el futuro de esta generación política pinta para desaparecer y de fea manera.Todas las baterías deberían estar puestas en el intento de inhibir la propagación del virus; cada funcionario público (como en tiempos de guerra) debería tener como prioridad el combate del COVID-19 por encima de la tarea específica asignada, y los gobiernos estatales y municipales deberían centrar todos sus esfuerzos en estar cerca (muy cerca) de la gente y comunicar hasta el cansancio lo que está pasando, lo que puede pasar y lo que hay que hacer.No bastan las redes sociales.Parece haber una soberbia inaudita en la forma de comunicar con el recurso fácil de “ahí les subo un video en mis redes; véanlo y compártanlo”. Eso es todo.Y después nos preguntamos ¿por qué muchas personas no están ni enteradas de que hay un Botón activado? Y lo que ello implica y significa.platapi.en.i@hotmail.com
