A instituciones como la Orquesta Filarmónica de Jalisco se les debe cuidar del mismo modo que a un museo donde se conservan piezas de arte. La música clásica ha enaltecido a la humanidad, la ha vuelto rica y la riqueza musical, en este caso, debe preservarse no solo como parte del legado técnico e histórico sino como una expresión de la belleza a la cual es capaz de llegar el hombre.La OFJ con más de cien años de antigüedad ha visto pasar grandes músicos y directores, ha sido parte de históricas puestas en escena y ha formado (para bien y para mal) el oído del público jalisciense. En los últimos meses hemos recibido buenas y malas noticias de parte de la Filarmónica. Trataré de mezclarlas esperando dejar las buenas al final y así quedarnos (creo) con algo de esperanza.El radio pasillo, desde que yo recuerdo, siempre ha cargado con quejas sobre la administración, pero es recientemente que estas se han desbordado. Desde el inicio de la pandemia pudimos ser partícipes -como público- del mal logrado proceso por el que pasaron los músicos en sus labores comparado con otras orquestas que estuvieron siempre dentro del escenario con todas las medidas protocolarias en torno a la crisis de salud haciendo producciones en las que sociedades enteras se encontraron. El manejo de redes sociales -que en estos tiempos es imprescindible para poder comunicar- es desolador.Resulta muy poco amable ver los conciertos grabados con un precario equipo de filmación y de audio que enmarcan el desinterés que hay de mostrar la calidad de músicos que integran las filas de la orquesta. Pero acá, el asunto administrativo es el que va en picada. Filtraciones de audios y correos donde desde hace meses se involucra a la gerencia por abuso de poder e incluso violencia de género ha hecho que también se haya hecho público el atraso de por lo menos 14 quincenas (incluida la última) y se tenga a una gran parte de los integrantes con contratos vencidos desde octubre del año pasado.Desde hace tiempo se sabe del incumplimiento de pagos a invitados y músicos extra que han quedado sin resolver. Ni hablar entonces, de un programa de vacunación para el personal. Esta pequeña punta del iceberg es la que ha provocado una importante rotación de músicos que han preferido migrar a orquestas de menos envergadura pero con mejores condiciones laborales, que estar en un lugar siendo tratados como escolares.Una buena noticia es que con la partida de la ex Secretaria de cultura el Gobernador del estado, Enrique Alfaro dijo con todo el ánimo que requería la situación, que la cultura sería prioridad.Discursos más, discursos menos, esperemos pues ver que así sea antes de que estos malos manejos terminen por golpear el frente artístico de una de las instituciones con más renombre del país.La otra buena, el 6 de mayo empiezan los conciertos presenciales y ahí estaremos así que, ¡música, maestros!argeliagf@informador.com.mx • @argelinapanyvina
