Fueron casi dos horas las que Alejandro Mayorkas, Secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, estuvo en Palacio Nacional para platicar con el presidente López Obrador, su gabinete de seguridad y el canciller Marcelo Ebrard.Al final, escueta declaración de Marcelo Ebrard sintetizando que hablaron de migración y seguridad fronteriza, además de ‘comentar’ los incidentes de las últimas horas en Nuevo Laredo, donde la detención de un capo del narcotráfico provocó una refriega que paralizó la frontera. Por su parte, en su cuenta de Twitter, dijo lo mismo el presidente, “seguimos promoviendo la cooperación para el desarrollo con justicia y respeto a los derechos humanos”.Todo, por el entorno en que se dio y lo que se difundió oficialmente , pareció que fue una visita de cortesía, de relaciones públicas y de amplia fraternidad, ya que en la foto oficial de la reunión Mayorkas aparece con un caja de regalo con los colores emblemáticos estadounidenses y después Mayorkas fue guiado en un recorrido por el Centro Histórico de la Ciudad de México, en alrededores de Palacio Nacional.Sin embargo esta es la cuarta ocasión en que Mayorkas, como encargado de la seguridad nacional del “injerencista” país vecino -como lo ha calificado el mismo presidente- viene a México, posiblemente con el encargo de la Casa Blanca de mostrar la preocupación por lo que se genera desde nuestro país y que está relacionado con el narcotráfico y a violencia.El narcotráfico -se estima- genera ganancias de 90 mil millones de dólares, las operaciones de lavado de dinero rondan los 25 mil millones de dólares y casi 300 mil armas pasan por la porosa frontera del norte a nuestro territorio, son situaciones que provocan disputa de territorios, inestabilidad en México y graves problemas sociales en Estados Unidos.Sin embargo no pudo ser más emblemática -bienvenida- la coincidencia de la refriega en Nuevo Laredo, con el agravante que la fachada del Consulado General de los Estados Unidos en Nuevo Laredo fue baleado, accidental o premeditadamente, lo que tiene un significado más profundo a las preocupaciones que provienen de los vecinos del norte.Esto solo puede ser una coincidencia, pero que de crecer este tipo de incidentes o agresiones, puede tensar más la deteriorada -en muchos sentidos- relación entre ambos países.El incidente, que hasta el momento aparentemente accidental -hasta no deslindar responsabilidades y para hablar apropiadamente, hasta que se cierre la ‘carpeta de investigación’-, puede cambiar mucho el tono de como se manejaran las futuras visitas -que de seguro van a continuar- del Secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos a México.Mr. Mayorkas… !Welcome to Mexico!¿Usted, qué opina?daniel.rodriguez@dbhub.net