¡Muy dolorosa noticia la de ayer! No cabe duda de que el ameritado periodista Luis Reyes Brambila le va a hacer mucha falta a los jaliscienses, en especial a Puerto Vallarta, y también al vecindario nayarita de Bahía de Banderas. La verdad es que se defendió cabalmente, pero a la postre sucumbió a sus males. Aun así, lo vamos a echar mucho de menos. El diario Vallarta Opina, construido desde los cimientos por Luis, nunca tan bien dicho, contra viento y marea, constituye un altivo monumento a su memoria. Su aparición cotidiana de más de 15 mil números, sin interrupción, durante 42 años años, algunos de ellos muy difíciles, gracias a la cerrazón de ciertos patasaladas cerriles que no comprendían la enorme importancia de la tarea que llevaba a cabo, representa un caso de excepcional valor e importancia en la historia de la cultura de Jalisco. Después de sus escarceos en El Occidental y el único periódico estudiantil que tuvo una vida razonablemente larga, llamado El Bachiller, precisamente por su vida proporcionalmente larga, dio lugar a que Luis adquiriera tal apodo, con una visión de muy gran alcance, decidió irse a vivir al puerto para hacer ahí un periódico.Todos le vaticinamos un pronto fracaso, pero afortunadamente nos tragamos los augurios. Día a día, sin excepción, Vallarta Opina fue haciendo su camino que pronto se convirtió en una gran autopista, pues su calidad, en cualquier sentido que se vea, superaba con creces las expectativas de un periódico de pueblo. Pero el hombre fue mucho más allá. No tardó en convertirse en un imprescindible en cualquier actividad que se llevara a cabo en favor de la vida cotidiana vallartense. Tanto su periódico como él mismo estaban siempre prestos a cooperar en cualquier actividad.Personalmente debo agradecerle haber secundado la oficina de El Colegio de Jalisco que constituyó durante varios años una verdadera punta de lanza para el desarrollo de muy diversas acciones, desde la publicación de buenos libros de tema local hasta conferencias y mesas redondas de valor general. Ahí están las concurridísimas conferencias que llevamos a cabo, entre las que destaca aquel ciclo con cinco primeras espadas que llevamos a cabo en el extinto hotel Camino Real, que no tiene parangón no solo en la historia de Puerto Vallarta sino incluso en la de todo Jalisco y una muy buena parte de nuestro país. Reyes Brambila es un verdadero hito en la historia de Puerto Vallarta. Ello me sirve de consuelo ante el enorme dolor de su pérdida. Mientras viva será un motivo de enorme orgullo haberme podido encontrar entre sus amistades más longevas y cercanas. jm@pgc-sa.com
