Hoy que los alcaldes y alcaldesas terminan el trienio 2018-2021, unos por primera vez, y otros por segunda vez, ocasión que los hará pasar a la historia como los primeros reelectos en alguno de los municipios metropolitanos más importantes, hagamos un breve repaso de cómo terminó cada primer edil que asumió su respectiva presidencia municipal el 1 de octubre de hace tres años.Desde luego serán las alcaldesas y alcaldes que se recordarán como los que tuvieron que enfrentar la fase crítica de la pandemia del COVID-19, situación que les hizo cambiar de prioridades y posponer, por la paralización de actividades, muchos de sus planes.Como sus antecesores de al menos cinco trienios, quienes estuvieron al frente del Ayuntamiento de Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco, Tlaquepaque y Tonalá y hoy terminan su gestión, se van sin haber hecho algo importante, para junto con el Estado y la Federación, enfrentar con mejores resultados la desbordada crisis de inseguridad y violencia que azotó a muchos de los que gobernaron.Esas serían las dos grandes sombras que fueron el común denominador de sus administraciones municipales, y hay otras que adquirieron matices específicos en cada municipio donde brilló más o menos cada alcalde o alcaldesa.El cierre hoy de las administraciones municipales metropolitanas, dominadas claramente desde el 2015 por los candidatos emanados por el partido Movimiento Ciudadano, quedará marcado por la sombra del gran ausente que es Ismael del Toro, quien arrancó hace tres años como el presidente municipal tapatío y hombre fuerte que sería el candidato natural para ser el candidato emecista para suceder a Enrique Alfaro, y quien sorpresivamente en marzo, a unos días de arrancar la contienda electoral, renunció a su candidatura para la reelección como alcalde tapatío que lo ponía en la antesala de la gubernatura, para desaparecer así de la escena política.Este prematuro ocaso político abrió paso a la llegada con todo reflector de Pablo Lemus para asumir de última hora la candidatura tapatía que, en su momento, le disputó abiertamente a El Pope, luego de dos bien manejados periodos de gobierno en Zapopan, donde impuso a su jefe de gabinete Juan José Frangie, como candidato naranja, pese a no ser ninguno del primer círculo alfarista. Ambos arrasaron en la elección, y hoy Lemus es el aspirante a gobernador más avanzado de MC.Sin tanto extremismo hubo también claroscuros en los otros municipios metropolitanos. La alcaldesa de Tlaquepaque, María Elena Limón, logró estabilizar un arranque con sobresaltos en su primer trienio y salir tras su reelección directa al Congreso federal como diputada. El que también salvó escollos y logró su reelección el pasado 6 de junio fue Salvador Zamora en Tlajomulco. En Tonalá el emecista Juan Antonio González tuvo en el continuo relevo de mandos policiales su mayor dolor de cabeza, lo que sin duda contribuyó, junto con los temas de paridad de género en las candidaturas, a no lograr siquiera la candidatura para su reelección en su municipio, que terminará regresando al expriista Sergio Chávez, quien hace tres años le cedió la silla y ahora la volverá a ocupar como soldado de Morena. Fueron las luces y sombras de un trienio más que hoy termina.jbarrera4r@gmail.com