En medio del escándalo mundial por las múltiples violaciones a los derechos humanos que implica el espionaje ilegal, por la intimidación que se busca en contra de opositores y de periodistas incómodos que son un obstáculo para los abusos de poder y las corruptelas de la clase política y gubernamental que se da en todo el mundo, y en el que México lidera, ayer la contralora estatal Teresa Brito reveló que en el sexenio pasado se contrató una plataforma similar a Pegasus que sobreexplotó el gobierno peñista, llamada “Galileo”, con lo que Jalisco no se salvó de la quemazón.La contratación de este programa para combatir secuestros, que incluía también una flotilla de vehículos, y que habría sido utilizado para espías ilegales, presenta distintas anomalías que ya son investigadas por la Contraloría estatal, adelantó Brito, desde el proceso de compra por 263 millones de pesos, el poco control que se tenía de su operación, y distintos elementos que les hacen suponer que se vulneraron datos e identidades. Esta investigación, dijo, se hará llegar a la Fiscalía General de la República que ya abrió un expediente por el caso “Pegasus”.De lo que el gobierno estatal no dio cuenta ayer fue de otro equipo de espionaje que también en 2014 habría contratado el mismo gobierno de Aristóteles Sandoval a la empresa italiana Hacking Team, que funcionaba casi con la misma lógica del programa Pegasus.Esto lo reveló a mediados del 2015 la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D) al mostrar documentación en la que la plataforma vendida por Hacking Team para intervenir comunicaciones se denominaba “Jasmine” y por la que se habrían pagado 448 mil euros a través de la empresa SYM Servicios Integrales S.A. de C.V.R3D dio a conocer además que el contrato firmado el 17 de diciembre de 2014 por Héctor Federico Zúñiga Bernal, entonces coordinador general de Asuntos Sociales de la Secretaría General de Gobierno.Por eso vendría bien que la Contraloría General adhiera, por iniciativa propia y sin petición vía Ley de Transparencia por algún tercero interesado, a su investigación del programa “Galileo” el llamado “Jasmine”. ¿Sigue o no vigente este contrato?Suponiendo sin conceder que efectivamente el gobierno estatal no espía a opositores, a periodistas críticos, a sus familiares, a sus fuentes, o hasta incondicionales y aliados oficiales para disipar dudas de su lealtad, como lo aseguró ayer el Gobernador Enrique Alfaro, lo que habría que aclarar también la Contraloría es si hoy en día existe alguna herramienta o contrato del tipo que maneje alguna dependencia del área de seguridad para realizar investigaciones contra grupos delincuenciales y hacer intervenciones telefónicas con ese fin. O si de plano el gobierno alfarista prescindió de estas herramientas indispensables hoy para adquirir inteligencia policial.jbarrera4r@gmail.com