La puntualidad es una cuestión de cultura y una férrea disciplina. Unos la tienen, otros de plano ni les importa cumplir. Cómo uno de los más importantes patrimonios que poseemos, es el tiempo. Pues más vale saberlo usar bien y cumplir con los compromisos que hemos pactado.El problema es que, al menos en nuestras costumbres, no hemos recibido una educación adecuada para el manejo y administración del tiempoA pesar del reloj, se nos hace muy fácil llegar tarde o antes, pero no con precisión. Para algunos es una falta de respeto el hacer esperar a los demás, o también estar esperando a que lleguen, puede llegar a sentirse una especie de insulto. De cualquier manera, es desesperante, se requiere de mucha tolerancia para no molestarse.De eso es de los que se quejan muchos extranjeros, que no acaban por entender la manera de ser de los latinos de ser tan impuntuales.Ya desde siglos se sabe que existen los ritmos circadianos, que es un vínculo que tenemos con la naturaleza, en especial con el Sol y la Luna. Y que cuando tienes una vida más estable y en armonía, tienes mucha más consciencia de esos ritmos y puedes moverte en el tiempo con más fluidez. En cambio cuando estás desfasado -porque duermes mucho, te desvelas, trabajas todo el día, te levantas muy tarde y comes a cualquier hora- entonces no estás bien conectado a tus ritmos del tiempo.Lo que induce a que pierdas la noción de temporalidad y acabes por no saber bien la hora que es, o incluso el tiempo que ha trascurrido en una actividad. Por lo que es inminente echar mano del reloj y tomar consciencia de los compromisos que se tienen. Y suele pasar, que cuando ya te acuerdas, ya vas tarde y desde luego, no vas a llegar a tiempo.Muchas escuelas de sabiduría, han enfatizado que la salud mental descansa en estar a tiempo en el presente, no vivir ni en el futuro ni en el pasado, sino en el aquí y el ahora. Por ello, varias escuelas de psicoterapia se basan en ayudar a corregir el gran desfasamiento temporal en que vivimos, llegando al extremo de perder la noción del tiempo y hasta del día en el que estamos.Así que ya sabes, la puntualidad es más saludable y de buena educación.
