Las prioridades del gasto público ejercido por cualquier Gobierno definen en buena medida los objetivos del gobernante en turno. No es la excepción ahora con el Proyecto de Presupuesto 2023 que el gobernador Enrique Alfaro Ramírez acaba de enviar al Congreso del Estado para su discusión y aprobación. Lo de su discusión es mera retórica parlamentaria, dado el control político que el actual titular del Poder Ejecutivo mantiene sobre el Poder Legislativo, de modo que, salvo cambios menores, se terminará aprobando el proyecto de presupuesto que ha sido diseñado por el actual Gobierno para el cierre de la administración en un año eminentemente preelectoral. Y de ahí en buena medida las prioridades contenidas en el presupuesto de Jalisco para el siguiente año.Por un lado, se trata del mayor gasto público que haya ejercido cualquier gobernador del Estado. Serán 158 mil 630 millones de pesos (MDP). Sólo para comparar, sin considerar inflación, hace 20 años el entonces gobernador panista Alberto Cárdenas ejercía un presupuesto en torno a los 30 mil millones de pesos.En el boletín oficial donde se informa del total del gasto para el siguiente año, el Gobierno estatal destaca que no considera aumentar impuestos, ni crear nuevos; sin embargo, se avisa que habrá un ajuste en derechos y aprovechamientos de acuerdo a la inflación. Todos los servicios y derechos que provee el Gobierno estatal aumentarán al menos 3.2 por ciento. El Informador publicó en primera plana el jueves pasado que habrá alza en multas, refrendo, el programa de MiBici, así como en trámites para sacar nueva o renovar licencias de conducir. Destaca, por ejemplo, que sólo por multas de vialidad el Gobierno del Estado estima recaudar 783 MDP. Y uno se pregunta si no sería mejor llevar a cabo programas de educación vial para promover que no se cometan faltas viales, en lugar de ver dichas faltas como una fuente recaudatoria.Volviendo a la justificación del presupuesto planteado por el Gobierno de Enrique Alfaro, señalan que el gasto para el próximo año, más de 70 por ciento se destina a gasto social: salud, educación, seguridad y programas de apoyo social y económico. Sostienen además que con este presupuesto “se busca consolidar los avances en proyectos de infraestructura con énfasis en proyectos carreteros, de transporte público, de infraestructura educativa, de salud, social y de conectividad digital”.Una gran apuesta del Gobierno de Enrique Alfaro es que pretende gastar hasta 35 MDP en obra pública, pero no sólo con recursos estatales, sino con presupuesto federal y dinero de contratistas privados vía los contratos de asociación pública privada, que operan en proyectos como la Línea 4 del Tren Ligero a Tlajomulco o la ampliación de la planta de tratamiento de aguas residuales de El Ahogado.Pero la polémica surge al revisar los detalles del gasto. Por ejemplo, resalta que el costo de la nómina y el gasto corriente de operación de la estructura de los poderes públicos se llevan uno de cada tres pesos del gasto: para sueldos y salarios se contemplan 44 mil 791 MDP; para materiales y suministros mil 464 MDP y para servicios generales cinco mil 031 MDP, en total todo el gasto corriente consumirá 51 mil 286 MDP que equivale a 32.33 por ciento del gasto total.Una de las perlas del gasto público para 2023 es que las unidades de apoyo al despacho del gobernador gastarán 244 millones de pesos al año, que equivalen a más 670 mil pesos por día, gasto que se ha interpretado para la promoción de la imagen del gobernador en un año preelectoral. Sin embargo, Enrique Alfaro negó que esa sea la intención y sostuvo que este gasto es para las campañas publicitarias de todo el Gobierno y no de su imagen.En la justificación del presupuesto se subraya que se contempla un gasto de 253 MDP para atender la búsqueda de personas desaparecidas, lo que representa 28 por ciento de incremento, casi el doble de lo que aumenta el presupuesto en general. A pesar del incremento, los recursos destinados a este fin quedan muy lejos de ser los necesarios para llevar a cabo programas de búsqueda eficientes. Implica que para cada desaparecido habrá apenas 46 pesos cada día para cada uno de los 15 mil 027 desaparecidos inscritos en el registro nacional. El dinero destinado a la deuda pública también es motivo de cuestionamiento, pues se destinarán tres mil 170 MDP a este fin, que según el Gobierno apenas representa 2 por ciento del gasto total; sin embargo, es superior al presupuesto que gasta cualquier Gobierno municipal en Jalisco, a excepción de Guadalajara y Zapopan. Los jaliscienses pagamos mucho por deudas que nunca nos consultaron. Si bien todos los gobiernos reiteran siempre que nunca habrá un presupuesto que alcance para todas las necesidades, las prioridades las deberían marcar los principales problemas que aquejan a la sociedad y no los intereses de los políticos en campaña o la inversión en obras de promoción para partidos. Lamentablemente el presupuesto de Jalisco para el siguiente año se diseñó pensando en partidos, campañas y promoción de la imagen del gobernador, no en las necesidades de los jaliscienses. rubenmartinmartin@gmail.com