Públicamente el Presidente Andrés Manuel López Obrador respondió de forma parcial a los reclamos que hizo el jueves pasado el gobernador Enrique Alfaro por la propuesta de gasto del gobierno federal para el 2021, la cual consideró “inadmisible” por “centralista” y por mostrar el desprecio de la Federación por estados y municipios, como lo anoté aquí el viernes pasado.El mandatario estatal reprochó que las asignaciones presupuestales para Jalisco incluidas en el paquete económico que presentó la semana pasada el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, a la Cámara de Diputados, disminuyeran 4.6 por ciento y que no se incluyeran recursos para la Línea 4 del Tren Ligero y por la eliminación del fondo metropolitano que pone en riesgo la continuación del Peribús, entre otros puntos.Pues bien, durante su visita del sábado pasado para inaugurar la Línea 3 del Tren Ligero y aún sin tener la plática que tuvo después con el gobernador, el Presidente refrendó su compromiso de iniciar el próximo año la Línea 4 que iría de la Línea 1 hacia Tlajomulco y a apoyar las obras del Peribús.Además, el gobernador comunicó el mismo sábado en sus redes sociales que luego de la puesta en marcha de la L3 tuvo oportunidad de platicar con el Presidente, como se lo había propuesto, de los temás que le preocupaban, y aunque no los precisó, bien podrían haber sido la reducción de los recursos para salud pese a la pandemia; la desparición del fondo para apoyar a las policías municipales; y la falta de apoyos para mantenimiento carretero, que también la semana pasada había destacado en una primera revisión que hizo del paquete presupuestal federal, junto con el equipo de la Secretaría de la Hacienda Pública.Pero lo más importante para Jalisco es que al parecer se abrió una tregua entre Alfaro y el Presidente, y no se dio la tensión que parecía asomar por el tema presupuestal. De hecho, a decir del gobernador, encontró en el Presidente gestos importantes de voluntad para tener espacios de diálogo y trazar una ruta de trabajo entre el gobierno federal y el gobierno de Jalisco. Quedó claro, dijo Alfaro, que “no hay ánimo de confrontación” entre su gobierno y el de la autollamada cuarta transformación.Lo cierto es que el encuentro del sábado pasado no tuvo los sobresaltos de la última visita presidencial el pasado 16 de julio, cuando estaba más reciente, tal vez el momento de mayor confrontación, cuando en los primeros días de junio el gobernador responsabilizó al Presidente de estar detrás de los desmanes ocurridos en Palacio de Gobierno tras la marcha contra la brutalidad policial por el caso Giovanni López, y a su vez López Obrador le reclamó desde su rueda de prensa mañanera haber faltado al respeto a su investidura presidencial al involucrarlo en ese caso.Habrá que ver cuánto dura esta tregua que sin duda es una buena noticia para Jalisco, y que los compromisos institucionales no se rompan por las disputas político electorales del 2021.jbarrera4r@gmail.com
