Hace algunas semanas escribí en este espacio, que el 29 de abril, en relación con la evolución de los contagios por COVID-19, el Presidente de la República dijo en su conferencia mañanera: “se redujo el contagio, se volvió horizontal, se aplastó la curva”. Pues resulta que al día 11 de junio la susodicha curva en nuestro país sigue recta.Cuando escribí el artículo al que hacía mención, el 19 de mayo se registraban 54 mil 346 casos; el número de acuerdo con el reporte al 11 de junio ha subido a 133 mil 974. Es decir que en los últimos 22 días los contagios crecieron un 147 por ciento.Esas cifras por sí mismas, podrían no decir mucho, por lo que es importante observar el comportamiento de los contagios que semana a semana se van dando, lo cual se muestra en la gráfica que se presenta a continuación.Se observa que el 26 de marzo se tenían 585 casos confirmados en México, pero en la semana siguiente se contagiaron 925 adicionales y en la subsecuente mil 931 más, y así, sucesivamente hasta llegar a la cifra de 28 mil 294 nuevos contagios en la semana más reciente.En lo que respecta a Jalisco, escribí en su momento que las medidas oportunas de confinamiento y suspensión de actividades masivas habían dado buenos resultados, y acoté que era prematuro cantar victoria, posteriormente escribí: Asumir que ya estamos regresando a la normalidad, o cuando mucho esto ocurrirá el 1 de junio, es una apuesta muy riesgosa que podría provocar un repunte de serias consecuencias.Hoy desafortunadamente observamos que la tendencia estable de abril empieza a crecer en mayo, cada vez con mayor intensidad. Se puede notar que en la semana más reciente se registraron mil 222 casos nuevos. Es decir, que en sólo una semana surgió una cantidad igual a la de todos los contagios que se habían acumulado en el estado hasta el 25 de mayo. Los datos de las gráficas han sido elaborados a partir de los informes de la Secretaría de Salud del Gobierno federal, los cuales como lo he señalado anteriormente, asumo que están subestimados; no obstante, para fines de mostrar tendencias resultan de gran utilidad.Por otra parte, existen los datos ofrecidos por las Secretaría de Salud del Gobierno de Jalisco en su página web: coronavirus.jalisco.gob.mx, en la que se agregan los contagios detectados por laboratorios locales, los cuales no son tomados en cuenta en la estadística del Gobierno federal. De forma tal, qué de acuerdo con estos datos, en Jalisco el número de casos acumulados al 11 de junio es de cinco mil 632, es decir 60% más de los que documenta el informe diario de López-Gatell.Por otro lado, vemos que en la Entidad en la que ha tenido mayor impacto la epidemia, la Ciudad de México, la situación presenta una tendencia a la mejora. A mediados de abril, en esa entidad se concentraba 30% de los casos del país, hoy esa proporción es de 25.En la gráfica que se exhibe a continuación se puede apreciar qué si bien el número de contagios es mucho mayor que en Jalisco, la tendencia de crecimiento semanal es menos pronunciada. Esto puede significar que esa entidad está más cerca de aplanar la curva. Finalmente, es posible aseverar que el crecimiento de la infección tiene una relación directa con la movilidad social; así que podemos suponer que al haber declarado concluida la etapa de Sana Distancia y dar inicio a la nueva normalidad, la incidencia de contagios seguirá presente.Es evidente que en nuestro país no es realista pensar en medidas estrictas de confinamiento, por razones sociales y económicas. Si a lo anterior le agregamos que los mensajes de las autoridades son confusos y a menudo contradictorios, y que el presidente de México da un pésimo ejemplo; no nos debe sorprender que mucha gente no guarde las precauciones más elementales en lugares de concentración. Estamos en momentos de alto riesgo de contagio, por lo que quienes tengamos el privilegio de poder permanecer en casa, no lo desaprovechemos; especialmente si vivimos en la Zona Metropolitana de Guadalajara, en donde se concentra 75% de los casos de Jalisco. Quienes tengan que salir, háganlo con las todas las medidas de prevención recomendadas por la OMS (fundamentalmente aseo de manos, uso de desinfectantes, uso de cubrebocas y mantener distancia de 1.5 metros de otras personas).