Durante la semana previa a la marcha a la manifestación ciudadana ‘El INE no se toca’, legisladores capitalinos de Morena lanzaron una campaña en la Ciudad de México para evitar el acarreo de personas y advirtieron que “no es una marcha a favor de la democracia, sino para golpear a López Obrador”. Las demostraciones que se dieron en todo el país y en algunas ciudades del extranjero, demostraron que no fue para “golpear” a nadie, que fue una auténtica y legítima decisión ciudadana en defensa del organismo que ha permitido que la democracia se respete en toda la extensión de la palabra.Hoy, en el preámbulo de la contramarcha que AMLO ha convocado para el 27, ahora son los diputados federales de la oposición quienes se han pronunciado a que en este evento “no se recurra al acarreo y que sea tan ciudadana” como la de apoyo al INE. Sin embargo, las redes sociales se han encargado de ‘desnudar’ la realidad bajo la que se organiza la contramarcha, mostrando documentos y videos en donde se ve a funcionarios estatales, municipales y miembros del partido oficial, que se están dado a la tarea de conseguir ‘voluntarios’, ya sea mediante el ofrecimiento de darles el día de trabajo y su ‘lonche’ o bien mediante la coerción en algunos sindicatos y organizaciones laborales, donde se les obliga a ser parte de la ‘espontánea muestra de apoyo al presidente’.Las respuestas a la contramarcha en el mundillo político han sido diversas a la intención verdadera del presidente, quien dolido y sorprendido de la concentración ciudadana a favor del INE, quiere mostrar ‘músculo’ popular con “una reacción visceral, y el presidente está bastante extraviado y perturbado”, según opinó Jorge Álvarez Máynez, coordinador del grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC).El ex candidato presidencial Roberto Madrazo, dijo que de AMLO que “como no soporta que la ciudadanía esté en contra de su transformación, va a sacar a sus acarreados...pero esto no es una competencia, usted gobierna para todos”, mientras que Manuel Clouthier señaló que “la locura y la soberbia tienen que ver con el ego, ése ego que necesita adulación, que se alimenta de pleitesía, de vítores de multitudes, aunque sean acarreados, lo importante es alimentar el ego del poderoso”.Serán los acarreados, los burócratas y muchos beneficiarios de los programas sociales los que serán obligados a ‘ser parte del montón’. Sin embargo, no solo será el tiempo de los ‘voluntarios’, sino el dinero que representará mover a esa multitud para cumplir con el capricho del presidente. Recursos públicos no reportados para el fin que se destinaran y que serán utilizados para satisfacer el deseo de ‘mostrar músculo’ ante la demostración ciudadana de hace unos días.Un asiduo lector de estas reflexiones a la noticia -Carlos Gil- me escribió y dice, “Creo que es la Marcha del Suicidio. ¿Por qué?. Porque nadie tiene recursos destinados a una movilización de este tipo. Entiendo que son acarreados, pero se necesita pagar los camiones, el lonche de cada uno de ellos, en algunos casos hospedaje y su ‘propina’. ¿Cómo le van a hacer? ¡Con sobres amarillos! Y eso, ¿qué va a demostrar?. Que son los Reyes del Cash y es por ello que debería de llamarse La Marcha del Cash”.¿Usted, qué opina? Daniel Rodríguez daniel.rodriguez@dbhub.net