En Jalisco, como ya es conocido, la gubernatura que se disputa en las elecciones de este año tiene a dos contendientes naturales: Pablo Lemus, el candidato del partido en el Gobierno, Movimiento Ciudadano, y Claudia Delgadillo González, la candidata de la coalición que encabeza Morena junto con los partidos Hagamos, Futuro, el Verde y Partido del Trabajo. Está la tercera opción: Laura Haro Ramírez, confirmada ya por su partido, el Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y el de la Revolución Democrática (PRD). ¿Tiene posibilidades?En ediciones anteriores de esta columna, abordamos el escenario de que en Jalisco, en la contienda por la gubernatura, se generara una contienda “de tres”, es decir, que los tres aspirantes a suceder a Enrique Alfaro Ramírez en el Gobierno estatal tuvieran posibilidades concretas de ganar la elección.Después de concluida la etapa de la precampaña y a la luz de los “acomodos” políticos y electorales que se han generado, las evidencias indican que sólo Lemus y Delgadillo competirán con posibilidades de ganar.No es pronóstico, ni augurio. Apenas reflejo de una realidad.Veamos las señales.El tema del presente texto es Laura Haro.Por eso, con brevedad, queda constancia de que Pablo Lemus es el aventajado en las encuestas. Su mayor reto es mantenerse y convencer; y también debe tomar con pinzas ese conflicto evidente que es la candidatura presidencial de Jorge Álvarez Máynez que no es avalada por el emecismo jalisciense.La señora Claudia Delgadillo tiene el respaldo de la candidata presidencial, Claudia Sheinbaum. Goza de ese regalo que ha sido el “crecimiento bruto” de las preferencias por Morena. Pero ella misma se ha puesto un grillete en el tobillo, porque reunió a un equipo de ¿ex priistas? que fueron colaboradores del Gobierno de Aristóteles Sandoval. Todavía no se hace visible que le estén ayudando, sino que son el equipo de campaña alterno al que encabeza Yassir Vázquez, coordinador oficial enviado por Morena para encabezar una campaña que aún está jaloneada por las divisiones internas. En su salud lo hallará.¿Y Laura Haro Ramírez?La candidata de oposición tiene virtudes conocidas y obstáculos por superar.¿Cuántos en el PRI están con ella? Si pudiera conocerse esa respuesta sería muy interesante.Acción Nacional pasa por el trago amargo de la desaparición de su líder moral, Octavio Esqueda, quien recién falleció el 20 de enero. Aparentemente, los panistas evitarán una nueva división interna y mantendrán la compostura hasta después de las elecciones del 2 de junio.¿El PRD? Han sido invitados sonrientes en cada encuentro.Laura Haro participó en el recordatorio del que hubiera sido el quincuagésimo cumpleaños de Aristóteles Sandoval; se congratuló porque oficialmente el PAN Jalisco la reconoció como candidata y ha compartido el apoyo que le otorgan los ex gobernadores panistas.Se conoce que en espacios donde sembró hace años la semilla de la inquietud y el apoyo de grupos juveniles, como en la Universidad de Guadalajara, todavía quedan muchos que le responden y la identifican. Pero actualmente, el grupo político de la Universidad hizo sus apuestas en un espacio diferente.Las encuestas dicen otra cosa: Laura Haro no está ni siquiera cerca de la contienda real por el Gobierno de Jalisco.De una reacción temprana y una estrategia bien trazada, en la que pesen menos los compromisos, dependerá que se convierta en opción.
