Muy al margen de las corrientes de opinión que hablan de sus nexos con Genaro García Luna -quien fuera secretario de Seguridad Pública con Felipe Calderón y quien se encuentra encarcelado en Estados Unidos bajo cargos de narcotráfico- y de una supuesta corresponsabilidad que ayudó a construir la ‘verdad histórica’ sobre la desaparición de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa cuando estaba comisionado en Guerrero- Omar García Harfuch es hoy uno de los aspirantes a gobernar la Ciudad de México.Cuando se pensaba que García Harfuch iría de la mano con Claudia Sheinbaum -en caso de ganar la elección presidencial- para convertirse en secretario de Seguridad Pública de México, los planes aparentemente cambiaron, muy a pesar de la supuesta animadversión de López Obrador, quien considera al ex jefe policíaco capitalino como ‘pupilo’ de García Luna, que ha sido su ‘blanco’ preferido por los supuestos nexos con grupos delincuenciales.El domingo pasado García Harfuch se sentó en la mesa de Café Político -con periodistas del diario Milenio- y aclaró nuevamente ese punto. “Cuando yo entro a la Policía Federal, Genero García Luna era secretario de Seguridad, la Policía Federal eran más o menos 39 mil mujeres y hombres, yo era jefe de departamento, nunca estuve en su oficina, nunca tuve un diálogo con él, nunca recibí una instrucción por parte de él”.El trabajo que desempeño como jefe de la policía capitalina -desde octubre de 2019 cuando tomó posesión- ha sido calificado como 'pulcro’ a pesar de la complejidad que representa una ciudad de más de nueve millones de habitantes y la coordinación de seguridad con la colindancia del estado de México, que supera los 20 millones de habitantes. Los ‘Informes de Evaluación de la Incidencia Delictiva’ de la capital han recibido reconocimiento de diferentes organismos nacionales e internacionales, donde se destaca la desarticulación de casi 250 cédulas de diferentes grupos criminales en la capital. Esos resultados le han creado un prestigio de eficiencia y efectividad, que se ha traducido en imagen de capacidad. Y si esa capacidad se lleva a otros campos de la administración pública, hay muchas posibilidades de lograr un triple objetivo: En continuar solidificando la seguridad de la ciudad, mejorar el manejo de la metrópoli en todos los órdenes y de paso intentar recuperar en las delegaciones el terreno político perdido sufrido en las elecciones del 2021, donde Claudia Sheinbaum se convirtió en la primera en gobernar la ciudad con la mayoría de las alcaldías en manos de la oposición. Tomando en cuenta esto último, con la imagen y arrastre de García Harfuch se puede aspirar a obtener nuevamente la mayoría delegacional y apoyado en el triunfo logrado en el Estado de México con Delfina Gómez, se podría tener una plataforma política sólida envidiable para el futuro inmediato y mediato de Morena.Además, uno de los principales problemas que tenemos en México es la seguridad. Entonces, pensar en candidatos con capacidad probada en ese nicho -y pensando en el futuro- tiene mucha lógica. Un candidato de esas características, colocándolo en una posición -para darle experiencia administrativa- de donde han salido el mismo Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum, pudieran estar colocándolo en la antesala del 2030.¿Usted, qué opina? Daniel Rodríguezdaniel.rodriguez@dbhub.net
