Fernando Valenzuela dominó la escena en el Dodger Stadium, aunque ciertamente habló más con su fuerte presencia, pues la profunda emoción por el enorme impacto del evento le cerró su garganta, más con las escasas palabras que alcanzó a articular logró generar la magna ovación de más de cincuenta mil almas que nos reunimos en el Dodger Stadium concitados por quien para los mexicanos amantes del Rey de los deportes, es simplemente: ¡El más grande!Impactante la influencia que aún tiene Fernando en la comunidad beisbolera latinoamericana, ya que no solo éramos decenas de miles de mexicanos en el estadio, sino también centenares o miles de fanáticos del juego de pelota provenientes de diversos países del mundo de habla hispana portando artículos alusivos a Fernando o a Dodgers ovacionando al carismático líder deportivo, ese Valenzuela que no pierde su sencillez y humildad siempre sonriente y otorgando el saludo o el fotógrafo sin miramientos, que a pesar de ser un astro ha permanecido terrenal y humano, emocionándose al Máximo al atestiguar, acompañado de Linda, su leal compañera de vida y toda su familia, en el inolvidable momento en que fue descubierto el mítico número 34 que desde el pasado viernes se ubica en el sector izquierdo del coloso del Chevez Ravine. Pero no sólo fue trascendente el retiro de la franela con el número 34 de Fernando Valenzuela, pues el nacido hace 62 años en el pequeño poblado Etchohuaquila en Navojoa, Sonora, no es solo un referente inmortal para el equipo azul, ya que el Consejo Municipal de Los Ángeles, proclamó al 11 de agosto como el "Día de Fernando Valenzuela", por todo lo que hizo para el beisbol con los Dodgers, el beisbol en general, y la importancia que tiene para toda la sociedad. La satisfacción de Fernando fue ostensible, al recibir el reconocimiento pleno que le debía la organización beisbolera profesional a la que sirvió por tantos años entregándole lo mejor de su habilidad y capacidad para lanzar desde la lomita de las responsabilidades; homenaje sumamente importante y de enorme trascendencia ya que significa el impulso que la influyente organización beisbolera albiazul debe generar para incidir con toda la fuerza en cuanto a la probable próxima nominación de Valenzuela para ser miembro del Salón de la Fama del Beisbol Mundial, espacio al que ya varias veces se ha intentado llevarle y se le ha negado el acceso, no obstante los nombrados méritos, ya que más allá de sus números estadísticos, está lo más valioso que tiene el gran serpentinero mexicano, la gran influencia ejercida y aún mucho muy vigente y actuante, como para lograr permanezca presente y activa la gigantesca afición mexicana y latinoamericana que hace del béisbol su más venerada actividad en relación a un deporte espectáculo.Valenzuela merece ser encumbrado al lugar destinado a los más grandes del béisbol universal tanto por sus méritos en el escenario deportivo como por el impulso que le ha dado al béisbol en una gran nación hispanoamericana como símbolo de los valores que nuestro deporte Rey conlleva.Bambinazos61@gmail.com