Es muy raro que en las ciudades densamente construidas haya posibilidad de examinar los sucesivos estratos arqueológicos que relatan su historia. Casos como el de la zona del Templo Mayor en México son excepcionales, y por lo general asociados con grandes construcciones. Todavía más complicado y raro es en las ciudades mucho más antiguas y más extensas, como es el caso de París. Sin embargo, actualmente se da una oportunidad importante para la prospección arqueológica; en el centro de París, en la orilla izquierda del Sena, se derribó el edificio que durante años albergó el cine Accatone, una sala de cine de arte de la calle Cujas del Barrio Latino, así que los especialistas de la arqueología del gobierno de la ciudad tienen seis meses para explorar palmo a palmo y estrato tras estrato una superficie de doscientos metros cuadrados y descubrir el pasado de ese predio, en las cercanías del antiguo foro romano de Lutecia.El equipo está conformado por siete especialistas del Departamento de Historia de la Arquitectura y Arqueología de París; uno de ellos, Julien Avinain, afirma que hace mucho que no se daba una excavación importante por ese rumbo, pues los últimos trabajos de similar calado tuvieron lugar en 2005-2006, debajo de la Biblioteca Sainte-Barbe, y en 2007, en el Instituto Curie. Los arqueólogos están entusiasmados porque su actual excavación está sólo a unas decenas de metros del Foro de la ciudad galorromana, que era el centro neurálgico de su vida cívica, económica y religiosa cuando la urbe se extendía hasta la cima de la colina de Santa Genoveva. Los expertos se saben de memoria la geografía antigua de Lutecia, ya que una de sus misiones es tener siempre al día el mapa arqueológico interactivo de París (que se puede consultar en línea).* Lo que esperan hallar no es una gran estructura, sino más bien vestigios de tiendas, talleres o viviendas y elementos de mobiliario doméstico, que por humildes que puedan parecer representan una mina histórica sobre la vida cotidiana de los antiguos parisinos. Hasta el momento sólo se ha excavado hasta una profundidad de un metro de la superficie actual, y se hallaron un capitel y fustes acanalados de columnas pequeñas que datan de finales del siglo XIII o principios del XIV y provendrían del claustro del antiguo colegio de Cluny.El mapa arqueológico interactivo presenta cerca de dos mil descubrimientos en París y se nutre de numerosas fuentes, desde los hallazgos de los siglos XVII y XVIII hasta los informes de los trabajos más recientes. El fondo más importante en relación con el establecimiento de los datos del mapa es el de Théodore Vacquer, primer arqueólogo parisino de finales del siglo XIX, que se conserva en la Biblioteca Histórica de la Ciudad de París. Vacquer es una figura muy importante, pues dio seguimiento a las grandes obras públicas que cambiaron la fisonomía de París en el siglo antepasado, en particular durante el reinado de Napoleón III.*https://fnp.huma-num.fr/adws/app/3298f631-53ea-11eb-91f3-dfc85aa511ba/tapatia55@hotmail.com
