Otra vez lo hizo Euzen: posicionó el mensaje del “Movimiento Naranja” como un spot viral. Le bastó un niño wixárica de 7 años, Ywaui, una tonada rítmica y un jingle que alcanza su apoteosis con una arenga gutural: “na, na, na, na, ná”.La canción, en sus tres versiones, que acompaña las giras de Enrique Alfaro y los naranjas a nivel nacional, fue subida apenas a Spotify y también se esparce en Facebook, Twitter y Youtube.Las críticas acerca de que utilizan a Ywaui como una “mascota” tiene trasfondo político, sí, pero eso no exculpa la utilización en nuestro país de niños como espectáculo. Si no asómense a las televisoras.La premisa de Rafael Valenzuela, el mastermind de la estrategia naranja, acerca de que la realidad política ocurre en las redes, puede ser debatible, pero hasta ahora le ha funcionado: apuestan otra vez por el electorado joven y conectado, con un mensaje digerible: na, na, na, na…***¿Cuántos van a reemplazar?El ritmo frenético de trabajo y recolección de firmas le valió un primer paso esencial a Pedro Kumamoto: ayer alcanzó las 115 mil firmas que requiere para conseguir un escaño en el Senado.En un plazo inferior al establecido, 83 días, logró su cometido: un promedio de mil 390 firmas en 45 municipios lo coloca a un paso del Congreso de la Unión.A nivel local, la plataforma “Vamos a Reemplazarles” con sus nueve aspirantes a independientes también avanza firme. Susana Ochoa, que busca el distrito 10, en donde triunfó Kumamoto, ya tiene la mitad de las firmas requeridas (lo logró en semana y media).Otros aspirantes wikis como Oswaldo Ramos (distrito 19), Susana de la Rosa (distrito 8) y Paola Flores (distrito 13) alcanzan también la mitad de apoyos requeridos o están a punto de lograrlo.Este primer corte le pone rasero a la fuerza “wiki” que conforme avancen los tiempos electorales, aumentará. ¿Imaginan un escenario en donde cada uno los 13 independientes logran una curul?Eso sí pondría en aprietos a la clase política tradicional…
