El sábado pasado en la plaza de toros de la CDMX, se realizó el evento de tenis de todos los tiempos, se batió el récord de gente que asistió a un partido de tenis, exactamente 42 mil 517 personas, un lleno total.Me tocó estar presente tanto en la rueda de prensa como en el mismo evento, y realmente fue algo emocionante para todos los que amamos a este deporte.El hecho de poder escuchar y después ver jugar a Roger Federer fue increíble.En la rueda de prensa Roger demostró ser un señor con todas las letras, tiene una humildad increíble.Siempre hablando con respeto, simpatía, dándole lugar a Zverev en todo momento, escuchando y atendiendo a cada una de las preguntas de los diferentes periodistas que estuvimos ahí presentes.Cuando le preguntaron a quién admiraba, dijo que a Mandela, que le hubiese gustado hablar con él. Otra pregunta fue cuál es el secreto de mantenerse jugando y a ese nivel, dijo que ama este deporte, se divierte y que este próximo año va a elegir menos torneos para no estar tan estresado, “quiero disfrutar más de mis hijos, ellos sólo una vez van a estar pequeños y no quiero desaprovechar esa oportunidad”.Sin duda alguna hay que aprenderle muchas cosas a Federer, su tenis es algo mágico, pero su personalidad es la gran diferencia con muchos otros atletas del mundo.Tenemos la suerte los profesores de tenis de tener un ejemplo como él para enseñarles cómo es un verdadero tenista, esa es la escuela que hay que aprender, él es el ejemplo del verdadero tenista, esa es la personalidad exacta, no le busquen más.Otro tema importante del evento fueron nuestros jugadores mexicanos, Miguel Reyes Varela y Santiago González, que el señor Raúl Zurutuza, director del evento, invitó a que jugaran contra los hermanos Bryan, ex número uno del mundo, los cuatro nos dieron una súper exhibición, ganando la pareja mexicana, demostrando una vez más, a pesar que es una exhibición, eso nos tiene que quedar claro, estos dos jugadores tienen el talento suficiente para estar entre los 10 primeros del mundo.El estadio retumbaba ¡México, México!, más de 42 mil personas gritando como si fuera Copa Davis, increíble momento.Al final Federer le gana al joven Zverev en el tercer set 6-2, a pesar que la altura no los ayudó y el tipo de bolas a las que no están acostumbrados a jugar, realmente nunca pudieron jugar a su mejor nivel, pero con tres pinceladas de sus talentos que nos dieron fue más que suficiente.La única mancha en el arroz fue el público, el tenis tiene sus reglas de conducta y respeto para presenciar un partido, pero muchas personas pensaron que estaban en un estadio de futbol o de beisbol, y eso sí molestó a los que nos gusta disfrutar del verdadero tenis.De la organización, promotores y todo lo que rodeó este evento, quiero dedicarle otro artículo especial, y es porque realmente hicieron un súper evento y además son los que creen en el tenis mexicano, y demostraron con este evento que el tenis en nuestro país no está muerto, hay muchísima afición y jugadores.