Hacia los años 70 del siglo pasado, el cine de la India era la gran excepción de lo que ocurría en el resto del mundo; gracias a distintos fenómenos era (es) la única industria que tiene año tras año mejores números que las películas hollywoodenses. La estadística de asistencia es, puede decirse, asombrosa: el cine producido en ese país genera el 80% de los boletos vendidos.Este éxito ha permitido a las productoras construir un género fílmico, irrepetible y profundamente local, que se conoce como Bollywood, donde suelen narrarse optimistas historias de amor, que ocurren en un entorno hostil, donde los personajes expresan sus sentimientos cantando y bailando. Este género es, quizás, al lado de la comida y la ropa uno de los rostros más conocidos de esa nación.Hace ya más de 10 años Danny Boyle filmó el homenaje más popular que se ha hecho a Bollywood cuando dirige “Quiero ser millonario”, que no sólo es un gran éxito de taquilla, ya que también se lleva 8 de los premios Oscar, incluyendo Mejor película y dirección. A manera de paradoja las películas de la India son, en lo esencial, fenómenos locales con un cierto impacto en ciudades donde la diáspora impacta en la integración de ciertos barrios de Nueva York, Londres y Toronto.Ahora el público de Guadalajara, gracias a la Feria Internacional del Libro, tendrá la oportunidad de conocer de primera mano al cine de esa región. Lo primero que sorprende es que sus producciones son ambiciosas y es visible la inversión financiera que implica la producción de cada película; hay un gusto por filmar historias fuera de sus fronteras y a su vez hay una permanente búsqueda por mostrar la riqueza y contrastes culturales y geográficos del país.De las 17 películas que se presentarán, a partir del próximo sábado en la Cineteca y del lunes 2 de diciembre en el Cine Foro, en la mayoría de las historias el conflicto central es el que estalla entre el individuo y las rígidas convenciones sociales, se retrata el conflicto entre el deseo de modernidad y el peso de las tradiciones. La mayoría de los títulos son recientes, pero presentamos dos películas que se pueden considerar como clásicos: “Gandhi” (1982), la impresionante biografía de uno de los líderes políticos que cambió el curso de la historia en el siglo pasado y “Namesake-El buen nombre” (2006) de Mira Nair, la cineasta hindú más importante a nivel mundial.