En el 2016, siendo diputada local del partido Movimiento Ciudadano y presidenta de la Comisión de Higiene y Salud Pública del Congreso del Estado, la doctora Consuelo Robles exigía vehementemente acciones “inmediatas y contundentes” a la Secretaría de Salud para la prevención del dengue, chinkungunya y zika, así como para el combate del mosco transmisor Aedes Aegypti, cuando en Jalisco en lo que iba de aquel año se habían identificado 174 casos de estos padecimientos.Así lo reclamaba: “Jalisco se ha distinguido por ser uno de los principales estados con pacientes enfermos; vemos que no ha disminuido los últimos seis años la tasa de enfermedad de dengue, zika y chinkungunya (…) en este 2016 tenemos ya 174 casos de dengue, los casos de zika y chinkungunya siguen en aumento”.Por eso sería muy oportuno y pertinente que ahora como titular del Organismo Público Descentralizado Servicios de Salud Jalisco, que junto con la Secretaría de Salud estatal, que encabeza Fernando Petersen, son los responsables directos de la, a todas luces, insuficiente estrategia para prevenir y enfrentar la peor epidemia de dengue en la historia reciente de Jalisco, explique qué acciones “inmediatas y contundentes” realiza desde su dependencia ahora que Jalisco amaneció ayer como primer lugar nacional en casos de dengue grave con mil 471, y cuando hasta la semana epidemiológica número 40 suman cinco mil 704 casos, 13 defunciones y 26 en estudio, así como primer lugar en casos probables de dengue con 39 mil 226.Como lo planteé aquí en septiembre pasado cuando ya se habían prendido los focos rojos por el crecimiento exponencial de los casos que en aquel momento era de 3 mil 405, y se habían levantado voces que exigían la renuncia del titular de la secretaría de Salud, por lo tardío de las campañas preventivas y las acciones de las brigadas de fumigación, esta emergencia de salud pública obliga a las autoridades sanitarias además de intensificar las acciones ya reactivas para detener la expansión de la epidemia, explicar qué sucedió para que Jalisco esté a la cabeza con el mayor número de caso de dengue grave y como segundo lugar en contagios de esta enfermedad que tiene atemorizados a las y los habitantes de muchas colonias del Área Metropolitana de Guadalajara, sobre todo en las 80 que se han detectado brotes de infección, así como en varios municipios de la entidad.A las preguntas planteadas en septiembre, en el sentido de por qué se nos disparó al quíntuple el número de casos en relación con el año anterior en Jalisco, se suman otras. ¿Hasta qué grado afectó la presunta mala relación y disputas de poder entre el titular de la Secretaría de Salud y la encargada de la OPD Servicios de Salud? ¿Se hicieron o no las fumigaciones preventivas en mayo? ¿Se hicieron o no bloques de casos cuando en junio el número de contagios empezó a crecer y se les dio seguimiento para fumigar la casa de los afectados y al menos tres cuadras a la redonda? ¿Cuándo y dónde se colocaron las llamadas ovitrampas para evitar la reproducción del mosco transmisor?Lo dicho, además de deslindar responsabilidades, responder a estas y muchas otras interrogantes será indispensable para evitar una epidemia fuera de control, como la actual, el próximo año.jbarrera4r@gmail.com