Domingo, 24 de Noviembre 2024
Ideas |

Del PRI al, ¡PLOP!

Por: Isaack de Loza

Del PRI al, ¡PLOP!

Del PRI al, ¡PLOP!

Tenía que pasarle una aplanadora encima, sufrir los estragos de una historia repleta de corrupción y clientelismo político y soportar a una cereza copetona y errática entre 2012 y 2018, para que el PRI, el partido dominante que se adjudicó los colores de la Bandera de México, finalmente se diera cuenta de que los ciudadanos lo aborrecen.

Y, según lo que los propios líderes de esa fuerza política han advertido, no hay estrategia de contención de daños que baste para enfrentar su crisis de descrédito. Hoy no hay forma de que puedan conectar con el electorado contemporáneo y lo que toca es derribar la casa y volver a colocar los cimientos.

Estadísticamente, el PRI pasó a ser el partido hegemónico de México a una agrupación sin gracia y en caída libre. Nada queda de aquel poderoso titán que se erigió en 2012 a billetazo, ¿limpio?, tras dos sexenios en la oposición. Hoy repta en despoblado tratando de morder, infectar y afiliar al primer incauto que se acerque sin voltear a ver el suelo.

El próximo 7 de julio, en la asamblea nacional del tricolor, la delegación Jalisco del Partido Revolucionario Institucional llevará una propuesta para que el PRI cierre ciclos, se corte el fleco y cambie sus siglas, su logo y hasta sus colores. Y la de los locales será sólo una de muchas que llegarán a la dirigencia nacional.

Porque no importa el color de la corbata que utilice, la marca de Alejandro Moreno al frente del que -hasta hoy- sigue siendo PRI, es la del fracaso. Ni en comunión con dos partidos que no sólo nacieron para ser rivales, sino que tienen filosofías antagónicas e incompatibles, pudieron eliminar del imaginario colectivo la voracidad rapaz que se vivió en la administración Peña Nieto.

El PRI está en ruinas, esa es una realidad que tardó mucho en llegar, pero llegó. El único resquicio de sus siglas es que llegan “partidos” a 2024, porque, según los votos que recibieron, nadie percibe revolución o institucionalidad en él.

Hoy, el PRI es un oxímoron, un sinsentido, un tumor que debe extirparse desde la raíz para que el paciente aspire a obtener más millones del erario en futuras elecciones. Por eso la narrativa es el cambio y la renovación. Así se quiere atrapar a votantes descontentos, tal y como lo hizo Morena: la escisión más exitosa que ha existido.

Una vez que la burbuja le estalló en la cara, el PRI se dio cuenta de que en México hay memoria, que el pasado pesa y que no necesariamente todo mundo quiere una selfie con Carlos Salinas de Gortari, un mechón de Enrique Peña o el saludo de Alito Moreno.

Cuando el dinosaurio se dio cuenta que había llegado su extinción, apenas entonces se enteró de los hijos de la devaluación que heredó, de la corrupción voraz que normalizó y de la desigualdad social con la que construyó un país para ciudadanos de primera, en tanto que utilizó como carne de cañón al resto.

En sus momentos de agonía, el dinosaurio se ha dado cuenta de que los mexicanos que gobernó le reventaron la cara con indiferencia, que llegaron a las urnas sin el mínimo interés de apoyarlo y que exigen el fin de una historia de descomposición, podredumbre y vicios que son el verdadero sello del PRI.

La estética de cambio en nombre, logo y colores que ya anunciaron bien podría revitalizar su imagen y relevancia en el panorama político actual… en tanto esto se acompañe de una transformación genuina en sus prácticas y políticas. O sea: sacar los cuadros viejos y oxidados para dar presencia a los perfiles frescos.

El éxito de su estrategia dependerá en gran medida de cómo el partido combine la renovación visual con cambios sustantivos en su estructura y comportamiento político. Pero eso es esperar bastante. Hablamos del PRI, así que habrá lo menos en su intento de evolucionar.

En el mejor de los escenarios, esta será la generación que vea el fin del Partido Revolucionario Institucional y el nacimiento del Partido Ligeramente Oportunista y Pintoresco: el PLOP. Y que la historia así los recuerde.

isaac.deloza@informador.com.mx

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones