Los sonoros desencuentros y encontronazos que iniciaron en julio pasado cuando el gobernador Enrique Alfaro descalificó, entre otras posiciones, la decisión del líder nacional del partido Movimiento Ciudadano (MC), Dante Delgado, de ir solos a la elección presidencial, y que fueron bajando de tono las últimas semanas, parecieron quedar superados ayer tras un encuentro de ambos personajes en el Senado.No se trató de una cita que se haya buscado por ninguna de las partes. Más bien fue un saludo público, que dio oportunidad para que se tomaran la foto del recuerdo, en el marco de un evento en la Cámara alta para conmemorar los 200 años de Jalisco como estado libre y soberano, que organizó el empresario y diputado federal emecista, Horacio Fernández.Ayer se hicieron a un lado los reclamos porque MC había optado por una ruta que él no entendía “ni en sus tiempos ni en sus formas” y en la que no creía, así como los reproches por no tomar en cuenta al emecismo jalisciense “que tanto” le ha aportado a ese partido, como se quejó en julio pasado. Más bien se mantuvo la ruta de distensión que empezaron a mostrar desde el mes pasado los emecistas de Jalisco al lanzar claras señales de haber decidido abandonar esa ruta de choque, cuando tanto Alfaro como Clemente Castañeda salieron a respaldar la eventual candidatura presidencial de su correligionario, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, que implicó abandonar su cuestionamiento inicial a Dante de llevar al partido por un camino aislacionista y aparecer como una Tercera Vía testimonial que sólo ayudaría a la causa de la 4T haciéndolos aparecer como esquiroles.De hecho, luego del encuentro casual con Dante en el Senado, Alfaro insistió que antes de Marcelo Ebrard, él preferiría que el postulado presidencial naranja fuera algún liderazgo que formará parte del partido. Alfaro confirmó que ya no participará en MC y que se retira de la política al terminar la gubernatura porque no es de los que “se aferra al poder” ni a la búsqueda de huesos que hace a los políticos “perderse en el camino”. Cuando se le preguntó si era el caso de Dante, por su larga trayectoria política y permanencia como líder moral de MC, el mandatario estatal lo negó y mando un nuevo guiño a Dante: “Yo creo que es un político profesional que ha hecho mucho por la democracia de este país”. Fueron como las pases de despedida para allanar el camino de los emecistas de Jalisco y a la dirigencia nacional del partido naranja en la búsqueda de rutas de conveniencia mutua, para que el partido no pierda su principal bastión de votos, y los emecistas locales no se queden sin el vehículo para lograr sus candidaturas.