Casi tres semanas después de la intervención para revisar el funcionamiento de la Comisaría de Seguridad Pública de Teocaltiche, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de la Guardia Nacional y de la Policía estatal repitieron ayer esa misma operación en el municipio vecino de Encarnación de Díaz.Lo que de entrada podríamos decir es que se trata de una avanzada territorial por parte de las autoridades federales y estatales que luce congruente y en el camino correcto en el intento de recuperar la región Altos Norte del Estado, que desde hace años esta bajo el control y el yugo de los grupos del crimen organizado que se disputan esa zona considerada logísticamente estratégica en el país, por estar ubicada en el centro de la geografía nacional y con conexiones carreteras hacia todos los rumbos del país, que la hacen un destacado polo de desarrollo económico.Habrá que ver si con el desplazamiento de los elementos castrenses y policiales de la Operación Teocaltiche hacia La Chona, no vuelven los sobresaltos y los enfrentamientos violentos que han marcado la dinámica social de aquel municipio alteño los últimos años, o si esta vez se logra de verdad una eficaz depuración policial que haga duradera la relativa tranquilidad lograda las últimas dos semanas y media en aquella población en la que la narco-guerra ha provocado desplazamientos de población que han dejado como pueblos fantasmas a varias comunidades.La otra gran incógnita a despejar será saber si los soldados y el personal de las corporaciones estatales y federales, logran en Encarnación de Díaz los golpes a la delincuencia organizada que se anotaron en Teocaltiche. Desde la identificación de los policías municipales con antecedentes penales que fungían como infiltrados de los grupos delincuenciales, pasando por el descubrimiento y desmantelamiento de fincas que operaban como fábricas de explosivos para drones y como centros de videovigilancia criminal con los que los cárteles tenían ojos y oídos en todos los puntos estratégicos del municipio, hasta rematar con la ubicación de narco-túneles que se utilizaban como pasadizos secretos de entrada y salida de sus casas de seguridad a espacios y edificios públicos.Por último y tomando en cuenta que el infierno de inseguridad y violencia que padecen los habitantes de Teocaltiche como sus vecinos de La Chona tienen como misma causa los constantes enfrentamientos entre las milicias del cártel Nueva Generación y del cártel de Sinaloa, habrá que ver si esta vez se golpea y persigue por igual a las células de esas dos organizaciones criminales en este municipio para que los gobiernos de los tres niveles recuperen ese territorio y cumplan su obligación de dar seguridad y protección a la población.