“Aun estamos en los dientes de la pandemia”, dijo ayer viernes el presidente Joe Biden cuando habló del estado de la economía y presentó su Plan de Rescate. Se refirió a las casi 460 mil vidas que se han perdido, a las diez millones que han quedado sin trabajo, a los 15 millones que no pueden pagar su renta y a los millones de familias que literalmente que se han quedado sin suficiente comida para alimentarse”.Y precisamente esa frase se puede tomar de base y aplicar a la disyuntiva que se ha presentado en en diferentes distritos escolares de todo el país sobre la reapertura de las escuelas.Aunque los efectos de la pandemia han cedido ligeramente -con disminución de personas infectadas y hospitalizadas- aún estamos lejos de estar en una situación que permita el regreso de los estudiantes a las escuelas.En California, la decisión del gobernador Gavin Newson quien ha pedido que las escuelas abran las aulas, ha chocado con los sindicatos de maestros que argumentan los elevados riesgos de agravar más la situación.Hay quienes opinan que el daño al nivel de educativo es severo y que se pueden tomar medidas para que paulatinamente se vaya normalizando el regreso a las escuelas. Pero hay otras, las más, que piensan que aún estamos en el pico de la pandemia, que falta mucho para decir que estamos en el descenso de la curva y tomar una decisión de esa naturaleza sería riesgoso.Newson señala que una vez vacunados los maestros y tomando medidas estrictas se puede implementar un plan de regreso a clases. Opción en la que los sindicatos de maestros se oponen y recomienda que continúen cerradas las escuelas hasta el término del presente ciclo escolar y que se continúe con la educación a distancia.El Centro de Control de Enfermedades Infecciosas (CDC) ha recomendado que bajo severas medidas se puede regresar a las escuelas y en el Plan de Rescate de Biden presentado ayer se asignan recursos para mejorar, entre otras cosas, la ventilación de los salones en las escuelas y la compra de equipo de protección personal. Sin embargo hay escepticismo y surge la disyuntiva.Una investigación de JAMA (Journal of American Medical Association) indica estar de acuerdo con la apertura, pero bajo estrictas medidas de seguridad, sin embargo otros organismos señalan que abrir las escuelas, como sucedió en Carolina del Norte, y con las consecuencias que hubo es peligroso. La disyuntiva está en el aire. Pero aunque se tenga el apoyo económico para implementar medidas de seguridad en las escuelas y la recomendación de los propios organismos de salud del estado, lo sensato -por la seguridad de maestros y alumnos- sería esperar hasta el verano para abrir las escuelas.. ¿Usted, que opina?.