El domingo pasado en el programa “60 Minutes” -de la cadena de televisión CBS en Estados Unidos- el presidente de Francia Emmanuel Macron contestó “May possible the unthinkable / Puede ser posible lo impensable”, cuando respondía a la pregunta de cómo en cinco años fue posible reconstruir la Catedral de Notre Dame después del feroz incendio que casi la redujo a cenizas. Esa frase fue perfectamente aplicada al caso del incidente que estuvo a punto de destruir una de las grandes atracciones turísticas en el mundo, pero definitivamente no se puede adaptar a la declaración de Claudia Sheinbaum ayer en la Mañanera del Pueblo cuando hacia referencia a la cacaraqueada “invasión” que supuestamente Donald Trump quiere promover en nuestro país para combatir a los cárteles del narcotráfico.Uno de los improvisados “reporteros” que se cuelan entre los medios a la conferencia, pregunto: “¿Está el ejército mexicano preparado, en caso de que en Estados Unidos, ahora que llegue el gobierno de Donald Trump, se llegue a cualquier tipo de invasión a México por el dado caso de enfrentamientos en contra de los cárteles mexicanos, si el ejército mexicano está preparado para esas acciones?” La respuesta tajante de Sheinbaum fue “No va a ocurrir... ” y habló del “respeto a las soberanías... ”, asegurando que después de la conversación telefónica con Trump de la semana pasada, “hablamos de la colaboración -entre ambos países- con respeto”.Sin embargo, al final de la breve respuesta a la “inteligente” pregunta, la presidenta comentó, “No va a haber una invasión, eso no es un escenario que tengamos en mente. Y, de todas maneras, tenemos nuestro himno nacional”. ¿Qué quiso decir? ¿Cuál fue el mensaje? o ¿es una declaración de guerra?La letra del himno dice: “Mexicanos al grito de guerra... Mas si osare un extraño enemigo profanar con su planta tu suelo, piensa oh patria querida que el cielo un soldado en cada hijo te dio” y la segunda estrofa sugiere, “Guerra, guerra sin tregua al que intente de la patria manchar los blasones”.Quisiera pensar que el mensaje de la presidenta fue en el sentido figurado y nacionalista, pero sin la intención de enviar un mensaje a Mar A Lago -donde radica el presidente electo- tan directo y contundente que se vaya a interpretar que “puede ser posible lo impensable”, como diría Emmanuel Macron.¿Usted, qué opina?