El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, inició la semana pasada, en nuestro país, una gira por América Latina con el propósito de fortalecer el trabajo regional, en materia de abordar temas en México, los países de centro américa, Argentina, Perú y Colombia.Esta primera visita tenía previsto limar asperezas con nuestro país, posicionarse con firmeza sobre la situación que atraviesa Venezuela, y alertar sobre la creciente influencia de China y especialmente Rusia, que tiene “sus huellas dactilares en elecciones de todo el mundo”.“Los tres países de América del Norte (Canadá, México y Estados Unidos) estamos interconectados y cuando tenemos una voz unificada, tenemos gran peso a escala mundial”, añadió el titular estadounidense de relaciones exteriores en un discurso bien distinto del que mantiene su jefe y buena parte del Departamento de Comercio de ese país.“América tiene mucho que ganar si la colaboración norteamericana mejora”, agregó por su lado, la canciller canadiense Chrystia Freeland, convencida de que pese a las dificultades que atraviesa la renegociación del TLCAN, lograrán alcanzar una solución que redunde en beneficios para los tres países.El canciller mexicano Videgaray, por su parte, ha incidido en la disposición de México a trabajar con “cualquier administración de Estados Unidos, y calificado de “fluida” la relación entre ambos Ejecutivos. “Ahora hay una mejor cooperación que anteriormente.”Tras el encuentro a escala ministerial, tanto Tillerson como Freeland, se reunieron con el presidente Peña Nieto, “coincidiendo en la importancia de robustecer la colaboración en materia de seguridad “a partir de un enfoque de responsabilidad compartida”.En la primera escala de su viaje por América Latina, Tillerson aprovechó para pedir una convocatoria inmediata de “elecciones libres y justas en Venezuela”, marcando así distancias con los comicios anunciados por Nicolás Maduro, para antes del 30 de abril.“Nos gustaría ver una transición pacífica si Maduro volviese a respetar la Constitución, restableciese la Asamblea Nacional y llamase a elecciones. Nuestro punto de vista es que tiene que volverse a cumplir la constitución.La situación que atraviesa Venezuela, añadió el canciller mexicano Luis Videgaray, es “dolorosa y grave para el continente”. Está en juego la democracia como forma de gobierno y no podemos permanecer indiferentes ante su sistemático deterioro.Videgaray, hombre fuerte del ejecutivo Peña Nieto, ha asegurado que su país tendrá “participación activa” en la resolución de la crisis venezolana, pero respetando “siempre” la soberanía del pueblo venezolano y rechazando cualquier solución que pase por el uso de la violencia “interna o externa”. El régimen de Maduro está violado los derechos humanos de su pueblo, complementó Freeland, y debemos hacer todo lo posible por restaurar la democracia y evitar el sufrimiento de la población.