Todavía los cielos de Guadalajara son brumosos y grises como en agosto, pero un día de éstos amanecerán de un azul más profundo, de otoño. Asombra que con tanta frecuencia se asegure que en estas latitudes “no hay estaciones”. Será que la mayoría de la gente no se fija cuando florean las primaveras o retoñan los fresnos, porque no le importa, o tendrá que ver con las pretensiones urbanas de quienes desdeñan la vida campirana (y que, cosa curiosa, suelen tener cercanos antecedentes rurales pero se avergüenzan de ellos). Como ya prefieren comer sopas maruchán y comprar en Walmart y no en el mercado, pues ni idea de las cosechas de temporada, por ejemplo.Lo cual, por supuesto, repercute en la dieta, algo de lo que tanto se habla hoy en día. Ya tampoco conocen ni siquiera los nombres de las plantas más comunes, ni reconocen los árboles o las flores: algo que sus padres y abuelos sabían, pero que tontamente no les enseñaron en su premura por parecer citadinos. En fin.Los periódicos ingleses tienen una sección bonita, divertida y civilizada que se trata precisamente de la observación de las cosas cambiantes a lo largo del año. Probablemente la más antigua sea “Country Diary”,* que desde 1906 se publica en The Guardian. La escriben varios corresponsales que viven en distintas partes del país; son brevísimas crónicas en las que igual se habla de las nubes, las flores de la estación, los pájaros que llegan o se van, las mariposas o los puercoespines, los árboles que toca podar… Cada año al acercarse la primavera las páginas de las cartas al director también reciben, por ejemplo, noticias de que en tal parte ya cantó el primer cuco. Desafortunadamente en ningún periódico tapatío, ni del país, se ve algo parecido. Alguna vez El Occidental tuvo una página hebdomadaria dedicada al mundo campirano, claro que desde el punto de vista de la actividad productiva del campo. Por cierto, estaba bajo el cuidado del eminente filólogo autlense Antonio Alatorre (quien también escribía las críticas de los conciertos de la Sinfónica). *https://www.theguardian.com/environment/series/country-diary