Una vez más vuelvo sobre el tema de la lectura, ya que en estos últimos dos meses he tenido tiempo para reflexionar y verdaderamente estoy cayendo en la cuenta de que nuestros mayores problemas se agudizan más fuertemente cuando baja el nivel de la capacidad lectora de nuestra población.Hace ya mucho, muchísimo tiempo apoyábamos la opinión de que “el mundo del futuro será de quienes sepan leer”.Verdaderamente, conforme el tiempo pasa, nos damos cuenta de que los medios digitales y las redes sociales, se encargan de darnos una gran cantidad de contenidos difícilmente asimilables, y que poco a poco se pierde la capacidad de leer.En un tiempo no lejano todavía, el papel era desconocido, o casi desconocido, pero había muchos otros medios nos acercaban a la lectura de las realidades circundantes.A la llegada del papel, el boom de la imprenta popularizó la lectura, y conforme los lectores de libros, revistas y periódicos se adentraban en los renglones tupidos de letras, la capacidad de “leer” o explicar otras realidades, se iba haciendo manifiesta, porque el cerebro despertaba sus habilidades latentes.Pero la llegada de la imagen en la T.V. vino a causar un notable retroceso en estos aspectos, ya que restaba posibilidades a la reflexión. Y en ver de leer con la mente, nos golpea de frente al sentimiento y allí se pierde por senderos más intrincados.Actualmente un fenómeno mucho más alarmante se da en nuestras redes sociales, a través de las cuales, el cerebro de “empacha” de imágenes, de ideas y de conceptos, definitivamente imposibles de asimilar.Es cierto que es un gran paso en el progreso tecnológico, pero no precisamente en favor de los seres humanos que, es preciso reconocerlo, tenemos un límite en capacidades intelectuales y sensoriales.Por lo tanto vamos emergiendo y quedándonos en planos más superficiales, donde, ya estamos viendo resultados muy alarmantes, como son los grados de violencia que se han desarrollado en nuestros ambientes.Repitiendo lo que muchas veces he afirmado, el ser humano no es unidimensional, y para lograr un desarrollo pleno e integral, es definitivamente darle atención a todos y cada uno de los niveles vitales de la persona.Es absurdo creer que con desarrollar solamente un nivel de la personalidad ya se logró un crecimiento integral. Es preciso dar a cada uno de los niveles su atención y “alimentación”.El nivel físico necesita ejercicio; el cuerpo necesita alimentación y descanso; el intelecto necesita instrucción; la conciencia requiere formación; al espíritu le hace falta oración... y para seguir progresando en niveles más altos, es preciso cultivar valores.Y uno de los caminos privilegiados es precisamente a través de la lectura, que llega a iluminar e ilustrar todos los niveles anteriores.Abriéndonos a la reflexión, podemos intuir qué es lo bueno y lo mejor. Aprovechar positivamente todo cuanto el progreso de la tecnología nos está ofreciendo y al mismo tiempo salir de esas espirales que nos envuelven y nos arrastran a niveles inferiores y que son precisamente los que nos traen en esa vorágine de violencia, de inseguridad y de otros malestares causados por todo aquello que inadecuadamente damos a nuestro cerebro a través de las tecnologías que siendo buenas, el abuso las está volviendo dañinas.Contradíceme, yo sé que hay quienes opinan diferente, pero a la hora de hacer balance veremos por donde andan los números rojos.En fin, yo invito a cada persona a dedicar un momento para reflexionar seriamente sobre estos asuntos, y bien podemos ver, que con un poco de buena voluntad y ayuda de Dios podamos encontrar un buen camino para salir de estos baches en los cuales nos encontramos atrapados y entrampados y lograr de veras hacer de nuestra Patria un México hermoso y feliz para las generaciones futuras.
