Hoy estarán volando a Washington el canciller Marcelo Ebrard, la secretaria de Economía Tatiana Clouthier y el subsecretario de Hacienda Gregorio Yorio. El motivo, reanudar las reuniones conocidas como Diálogo Económico de Alto Nivel con autoridades del gobierno estadounidense.Los funcionarios mexicanos llevan un encargo especial que habrán de cumplir antes de la reunión de Alto Nivel, hacer llegar a la Casa Blanca una carta personal del presidente Lopez Obrador (AMLO) dirigida a Joe Biden, donde le pide que acelere el plan de ayuda a los países centroamericanos para evitar que más migrantes continúen buscando llegar a Estados Unidos. Hasta ayer martes no se había mencionado si los representantes de nuestro gobierno lo harán en forma personal al presidente Biden o simplemente servirán de correo para que llegue a su destino.Por supuesto que el interés de AMLO es que México deje de ser el corredor de acceso al país vecino, que tantos problemas está provocando en la frontera sur con el ingreso de los caravanas, así como en la frontera norte donde hay decenas de concentraciones de migrantes que se han convertido en peligrosos y riesgosos hacinamientos.AMLO dijo que en el sur se busca contener a los migrantes, “Porque permitir la introducción por completo al territorio significa muchos riesgos de violacion de derechos humanos”, como está sucediendo en los últimos días donde las denuncias han ‘llovido’ en contra de las autoridades migratorias.Señala el presidente que “hasta donde podemos, estamos haciendo una labor de contener la afluencia migratoria”. La realidad es que el problema ya rebasó a la capacidad de la autoridad migratoria y el problema es más grave. No hay una solución inmediata y la mediata es la inversión a gran escala en los países generadores de migrantes para evitar su salida. Pero esto toma tiempo y la gravedad de las circunstancias requieren acciones urgentes.Y ante esa urgencia y realidad dramática que se tiene -sobre todo en la frontera sur- se requiere arremangarse la camisa, dedicarle menos tiempo a las mañaneras y ponerse a planear una estrategia multinacional. En estos tiempos, enviar una carta al presidente Joe Biden -cartita al ‘Niño Dios’-, quien por otras circunstancias está acorralado en muchos sentidos con otros asuntos, no parece la mejor opción. En el problema de la migración México es el más afectado, y por ello debe tomarse la iniciativa de convocar a una reunión urgente con los países involucrados o bien a través de una videoconferencia, donde estén presentes los mandatarios y que entre todos le den celeridad para encontrar una solución o tener acuerdos conjuntos en un asunto que no se puede postergar. ¿Usted, qué opina?