Con una diferencia de minutos, primero reclamó a Estados Unidos que “no hay una política de buena vecindad” y después con una seguridad pasmosa establece que “son muy buenas las relaciones con Estados Unidos”. ¡Así es, le atinó!, fue el presidente Andrés Manuel López Obrador ayer durante su verborrea matutina.En el reclamo hizo referencia a los migrantes que transitan por México, señalando que ni Estados Unidos ni la Organización de las Naciones Unidas (ONU) promueven planes para enfrentar el problema. “No, es que no hay nada, no hay una política de buena vecindad, como en la época del Presidente Franklin Delano Roosevelt o una Alianza para el Progreso que aplicó el Presidente Kennedy, no existe ningún plan para el desarrollo de los pueblos de América Latina y el Caribe”. Mientras que en elogio, informaba que en noviembre o enero próximo planea reunirse con el presidente Joe Biden -en Washington o en México, si acepta la invitación-, donde “voy a tratar temas de desarrollo, migración, narcotráfico y todos los temas de desarrollo bilateral -nada nuevo y muy obvio-. El ha sido muy, muy amable, muy atento y son buenas las relaciones con Estados Unidos”. Así de desconcertante es nuestro mandatario. Primero ‘avienta la piedra’ y segundos después ‘abre los brazos’.Y así como es desconcertante para plantear la relación con nuestro principal socio comercial y vecino, es incongruente con la decisión tomada de no asistir a la Cumbre del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC), que habrá de celebrarse del 11 al 17 de noviembre en San Francisco, California, argumentando que las diferencias políticas que existen con Perú, “no voy a asistir a la cumbre, porque no tenemos relaciones con Perú, y no queremos participar en eso con todo respeto. No puedo ir por esa razón”. ¡Hágame usted el favor!Dentro de la APEC hay 21 economías/miembros -Australia, Brunei, Darussalam, Canadá, Corea, Chile, China, Estados Unidos, Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Papúa Guinea, Perú, Rusia, Singapur, Taiwán, Tailandia y Vietnam- y como Perú ha sido designado Presidente de la APEC para el 2024, es uno de los infantiles pretextos del presidente mexicano para hacer su ‘berrinche’.Y para que López Obrador -quien reformó la ley de seguridad bajo el cuestionamiento de que agentes estadounidenses operan en México sin que las autoridades mexicanas hayan sido informadas y restringir las operaciones de la Drug Enforcement Administration (DEA)-, tenga en que ‘divertirse’ en las próximas horas y días -y posiblemente hacer otro ‘berrinche’-, el Departamento de Estado norteamericano implementó la ‘Estrategia para Combatir los Opioides Ilícitos’ que fue elaborada por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional y que fue publicada el jueves por el periodico El Universal. Y en el documento se confirma la asignación de oficiales y fiscales a sus Unidades de Investigación Criminal Transnacional (TCIU) en México, que estarán “desplegados en lugares de todo el país para promover investigaciones de alto perfil apuntando a los carteles mexicanos y otras organizaciones del transnacional”. En la estrategia no se habla de que el gobierno mexicano esté enterado o participe en los operativos.Así que a las reacciones desconcertantes, incongruentes e infantiles desde Palacio Nacional, tendremos que agregarle los ‘berrinches’.¿Usted, qué opina? Daniel Rodríguezdaniel.rodriguez@dbhub.net