Mientras nada de se sabe desde la noche del viernes pasado del paradero de Roberto Cuéllar, Uriel Galván, Dante Hernández, Diego Alberto Lara y Jaime Miranda, los cinco jóvenes amigos desde la infancia vecinos del municipio de Lagos de Moreno, su caso se puede contar ya como la quinta desaparición múltiple de diciembre pasado a la fecha en Jalisco.Primero fue el caso de las hermanas Viviana y Daniela Márquez Pichardo, de su prima Irma Paola Vargas Montoya y José Melesio Gutiérrez, que conmocionó en enero a las comunidades asentadas entre Zacatecas y Colotlán, cuando se les encontró sin vida en la comunidad de Víboras en el municipio de Tepetengo, tras desaparecer desde el 25 de diciembre en los linderos de Zacatecas con Jalisco.En febrero vino la desaparición de los jóvenes Enrique Esparza, Raúl Alejandro Barajas y Jonathan Omar Vázquez de la Zona Real de Zapopan, sin que nada se sepa de su paradero hasta ahora. En junio se registró el caso de las y los jóvenes que trabajaban en un presunto call center en La Estancia, Itzel Abigail, Carlos David, Benjamín, Arturo, Jesús Alfredo, Mayra Karina y Jorge Miguel, cuyos cuerpos sin vida se encontraron en una barranca del municipio de Zapopan. A fines de julio desaparecieron del conflictivo municipio de Encarnación de Díaz las hermanas Adriana, Marisela, Rosa Olivia, y su amiga Beatriz, que permanecen ilocalizables. Mientras sus familiares esperan que aparezcan sanas y salvas, al igual que los padres y las madres de los jóvenes de Lagos de Moreno, la localización ayer de un segundo vehículo con restos humanos fue un duro golpe que pegó en las esperanzas de encontrarlos con vida.Aunque la Fiscalía estatal actuó con mayor diligencia en cuanto se denunció el viernes pasado el caso de los jóvenes de Lagos, en el caso de las jóvenes de Encarnación de Díaz, los familiares se han quejado de falta de acompañamiento e incluso el 4 de agosto el Fiscal de Aguascalientes, Jesús Figueroa Ortega, denunció que en Jalisco, donde debió iniciarse la investigación por oficio, la Fiscalía en Lagos de Moreno perdió tiempo valioso al no querer aceptar la denuncia de los familiares.Ayer uno de los vehículos de los jóvenes privados de su libertad en Lagos de Moreno apareció ardiendo en Encarnación de Díaz con restos humanos en su interior, lo que confirma que en esta región, como en muchas otras de Jalisco y del país los sicarios del narco transitan y delinquen sin que nadie les ponga freno o los detenga por los crímenes que cometen. Cinco desapariciones múltiples de diciembre a la fecha en Jalisco es algo inadmisible y debe ser un urgente punto de inflexión para que autoridades municipales, estatales y federales hagan algo efectivo para cumplir su obligación constitucional de garantizar la seguridad e integridad de la población. jbarrera4r@gmail.com
