Algunas veces el viaje llega motivado por las ganas de conocer un destino soñado. Otras veces es el impulso pionero de caminar por donde nadie lo ha hecho. Pero no dejemos fuera una de las razones por las que a veces se empaca todo: Un corazón roto.El cierre de una relación no debe ser el final del mundo, y al contrario, puede ser un buen pretexto para comenzar a explorarlo. Claro, claro, podemos hacer la maleta convertidos en un mar de lágrimas, pero sin duda la travesía, los nuevos horizontes y las almas que encontraremos en el camino ayudarán a que poco a poco sanemos.En estos días donde Christian Nodal y Belinda son tendencia, el tema de los rompimientos escandalosos está sobre la mesa. Ella se fue a España a trabajar -por no decir que a vivir-, mientras que “el Nodal” se entretiene en su Twitter. Para ellos y todos los que busquen sanar el corazón, unas recomendaciones:YucatánCon Mérida como puerta de entrada, aquí las opciones son infinitas. Yucatán combina cultura, aventura, naturaleza, vanguardia y una gastronomía espectacular.Quienes busquen alimentar el alma y la mente pueden disfrutar de zonas arqueológicas como Chichén Itzá y Uxmal, cuyas espectaculares pirámides han fascinado a los arqueólogos por siglos.Los que buscan aventura pueden disfrutar de la exhuberancia de Ría Lagartos o armarse una ruta de cenotes -muchos de ellos cerca de la capital-, donde es posible sumergirse en aguas que han visto pasar mil historias de amor, unas con mejor final que otras.Para quienes tienen buen diente, está de más decir que Yucatán cuenta con una gastronomía inmensa: cochinita pibil, papadzules, sopa de lima, panuchos y queso relleno son algunos de los más famosos. Lo más recomendable es llevar flojito el pantalón.NayaritAdiós corazón roto, hola playas de Nayarit. Quizás la transición no sea rápida, pero sin duda las olas, el ambiente y la calidez de la gente nos hará dejar de tararear “adiós amor, me voy de ti” cada cinco minutos. Nayarit ha impulsado en especial la zona de Riviera Nayarit, donde encontramos un par de joyas bohemias. Por un lado la vibrante Sayulita y del otro el desenfadado San Pancho.Sayulita será buen refugio para el viajero que busque fiesta, diversión nocturna, buenas olas para el surf y expresiones culturales intensas.Quienes busquen reflexión, remansos de paz, espacios para meditar o nada más un traguito de raicilla, su opción perfecta es San Pancho. En ambos casos, la costa nayarita bendice estas tierras con una magna gastronomía, brillando los aguachiles y los tacos de pescado, servidos generosamente.QuerétaroEn el Centro del país, esta Entidad atrae al turismo con joyas como Peña de Bernal o Tequisquiapan, amén de la propia capital, cuyo Centro Histórico es un genuino museo al aire libre.Pero en años recientes han sido sus viñedos y todo los productos turísticos que hay a su alrededor lo que ha puesto de moda a Querétaro. Las botellas que salen de aquí han conquistado a paladares de todo el mundo, por lo que un tour por sus bodegas es un infaltable. También prueba su producción de quesos (en especial en Tequisquiapan), que es una maravilla, además de que las fiestas de vendimia ya están a la vuelta de la esquina.Al filósofo y político romano Lucio Anneo Séneca se le atribuye la frase “el vino lava nuestras inquietudes, enjuaga el alma hasta el fondo y asegura la curación de la tristeza”. Más de 2 mil años después, esa frase sigue vigente, como se descubre al recorrer Querétaro.EL TIPLa seguridad ante todoRecuerda compartir tu itinerario antes de viajar con tus seres queridos: Hoteles donde te quedarás, rutas y contactos.