Los microplásticos están en todos lados. Estas pequeñas partículas se han encontrado desde en los tractos digestivos de ciertos animales marinos que navegan en las profundidades del mar, hasta en las botellas de agua que uno puede consumir en las tiendas de conveniencia.De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Columbia y la de Rutgers en Estados Unidos, las botellas de agua contienen un promedio de 240 mil partículas de microplásticos por litro de líquido. Los científicos aseguran que la mayoría de estas partículas provienen de la botella y que no se sabe cuán perjudicial es su consumo.También se encuentran en la comida. Casi cualquier alimento cosechado por la agricultura contendrá una cantidad determinada de este contaminante. Lo cual implica que prácticamente en cada bocado que ingerimos encontremos estos contaminantes que ingresarán a una parte de en la corriente sanguínea.Una de las acciones principales que se puede intentar es cambiar las botellas de plástico a las de cristal. Esto además permitiría reducir la huella de carbono.Además de ello, distintos investigadores trabajan en mejorar los procesos de filtrado con hongos, bacterias y distintas larvas que puedan devorar los distintos componentes plásticos.* * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de Whatsapp * * *OB