El chamoy es considerado un dulce y se ha vuelto el acompañamiento ideal para los antojitos de los mexicanos, ya sea en su versión en polvo para las frutas, en las bebidas como las cervezas o en salsa para las papitas o las mangonadas, ideales para esta temporada de calor. Sin duda, el chamoy puede llegar a ser el favorito de muchos, sin embargo, consumirlo en exceso puede provocar problemas graves en la salud. El origen del chamoy no es mexicano, sino chino y se remonta a una especie de durazno seco llamado See- Mui, pronunciado en dicho país como See-Moy que aunque se desconoce cómo llegó a México, se cree que fue a través del comercio de China con Nueva España.Con el tiempo, los mexicanos le agregamos chile, hasta crear el balance entre picosito, dulce y acidito y se bautizó como chamoy. Consumir todos los días chamoy puede provocar úlceras, problemas estomacales e incluso cáncer, por ello no es recomendable para niños pequeños pues contiene altos contenidos en sal y colorantes.También el chamoy contiene rojo 40, un colorante utilizado en alimentos procesados y que se asocia a la hiperactividad y déficit de atención infantil.Finalmente, hay personas más propensas al colorante rojo 40, el cual al entrar en contacto con los alimentos, este puede presentar reacciones alérgicas, como hinchazón alrededor de la boca. NA