La deshidratación se produce cuando el cuerpo pierde más agua de la que recibe, y ciertos alimentos y bebidas pueden contribuir a este problema. El consumo de productos con altos niveles de sal y cafeína aumenta la pérdida de líquidos y puede resultar en deshidratación.Los síntomas de deshidratación incluyen boca seca, fatiga, mareos y disminución en la producción de orina.En casos graves, la deshidratación puede ocasionar complicaciones como golpe de calor, insuficiencia renal y otros problemas de salud. A continuación, se enumeran siete alimentos y bebidas que pueden causar deshidratación.La comida rápida, como hamburguesas y pollo frito, contiene niveles significativos de sal añadida, lo que puede resultar en deshidratación si se consume en grandes cantidades. El alto contenido de sodio en alimentos salados conduce a una mayor producción de orina. Según un estudio realizado con 156 jóvenes adultos, aquellos con una alta ingesta de sal mostraron un nivel de hidratación inferior en comparación con los participantes que consumieron menos sal. Para mantener un equilibrio adecuado, los riñones aumentan la excreción de orina, lo que puede provocar deshidratación en el cuerpo.El alcohol funciona como un diurético, incrementando la producción de orina y el riesgo de deshidratación. Además, puede afectar la alerta y el juicio, lo que disminuye la probabilidad de que la persona reconozca la necesidad de hidratarse. Aunque consumir pequeñas cantidades o elegir bebidas con bajo contenido de alcohol, como la cerveza, es poco probable que cause deshidratación significativa, el consumo excesivo puede contribuir a este problema.Aunque el azúcar por sí mismo no suele considerarse deshidratante, muchas personas consumen bebidas azucaradas en lugar de agua, lo cual puede llevar a la deshidratación. Estas bebidas pueden causar pérdida de fluidos en el intestino y afectar negativamente la salud renal. El consumo de refrescos después de realizar ejercicio intenso en el calor puede dañar los riñones y causar lesión renal aguda.Muchas bebidas energéticas son muy altas en cafeína, lo que puede aumentar la producción de orina en grandes dosis y ralentizar la absorción de líquidos en el tracto gastrointestinal. Además, estas bebidas tienden a tener mucho azúcar añadido, lo que puede agravar los problemas de hidratación. Las bebidas energéticas se han relacionado con efectos secundarios graves, como ansiedad, ritmo cardíaco irregular y daño renal.Los snacks salados, como las papas fritas y los pretzels, son una de las principales fuentes de sodio en la dieta. Seguir una dieta alta en sal puede contribuir a la deshidratación al aumentar la pérdida de agua a través de la orina. Limitar alimentos con sal añadida y elegir snacks más hidratantes, como frutas y verduras, es una forma efectiva de conseguir una hidratación óptima.Un estudio reciente del Departamento de Ciencias de la Nutrición, de la Universidad de Toronto, identificó 15 categorías de alimentos que representan más del 50% de la ingesta total de sodio en la dieta estadounidense, y la pizza encabezó la lista. Una rebanada de este alimento con salame de una cadena de restaurantes contiene 664 mg de sodio, lo que proporciona el 28% del valor diario recomendado. Este alto contenido de sodio puede contribuir a la deshidratación.Las carnes procesadas, como la panceta, el jamón y las salchichas, generalmente tienen un alto contenido de sodio, utilizado tanto para conservar como para saborizar estas carnes. Un alto consumo de carnes procesadas puede contribuir a una alta ingesta de sal, vinculada a una hidratación deficiente. Limitar el consumo de estos alimentos y optar por alternativas más frescas y naturales puede ayudar a mantener una hidratación adecuada.MF
