Uno de los enigmas culinarios más comunes es el proceso de oxidación que transforma el verde vibrante del aguacate en un tono marrón o negro después de un tiempo al aire libre. En este artículo, exploraremos las razones detrás de este fenómeno y cómo evitarlo.Cuando cortamos o dejamos el aguacate al aire libre, sufre un cambio de color debido a un proceso de oxidación. Este cambio se debe a la exposición al oxígeno, que interactúa con una enzima presente en la fruta llamada polifenol. El grado de oscurecimiento dependerá de cuánto tiempo el aguacate esté expuesto al aire.Es importante destacar que este proceso de oxidación no afecta en absoluto la calidad del aguacate ni lo convierte en un producto en estado de descomposición. Consumir aguacate oxidado es completamente seguro y no debe confundirse con alimentos en mal estado.Afortunadamente, existen métodos sencillos para evitar que el aguacate cambie de color. Uno de los consejos más efectivos es rociar unas gotas de jugo de limón sobre la pulpa del aguacate, ya que el ácido cítrico actúa como un antioxidante natural que ralentiza la oxidación. Además, colocar el aguacate en un recipiente hermético y almacenarlo en el refrigerador también es eficaz para mantener su color original.Además, se recomienda dejar el hueso en la parte no consumida, porque actúa como protector frente a la oxidación. También es útil envolver la parte no utilizada en papel film para preservar su frescura.En resumen, la oxidación del aguacate es un proceso natural que no afecta su seguridad ni su calidad. Con algunos consejos sencillos, podemos disfrutar del aguacate sin preocuparnos por su cambio de color. AH