Se cree que cenando demasiado tarde se puede ganar peso, pero esta creencia está relacionada con la secreción de insulina por parte de nuestro organismo.Los mexicanos tenenemos la costumbre de cenar muy tarde y pesado, quizás por que pasamos todo el día fuera de casa trabajando o estudiando. Recientemente han surgido opiniones de expertos sobre cómo las comidas en la noche, especialmente aquéllas que son abundantes y que realizamos antes de irnos a dormir, pueden alterar el organismo y el sistema digestivo.Un estudio presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, encontró que consumir alimentos tarde por la noche tiene un impacto significativo en la presión arterial del individuo.Cuándo comemos algo, los niveles de azúcar en nuestra sangre se incrementan, produciéndose, además, una liberación de insulina. Esto implica que, si cenamos antes de irnos a la cama, nuestros niveles de azúcar se elevarán de nuevo. Sin embargo, esta suposición no ha sido claramente probada. Lo que quizás sí sucede es que con el estómago lleno se duerme peor. Ya que si se come algo justo antes de irse a dormir, el estómago seguirá trabajando mientras trata de digerir la cena, lo que, sin duda, dificultará el descanso a nuestro cuerpo.Lo ideal es que se consuman alimentos por lo menos dos horas antes de dormir para que el estómago digiera la comida y sea mucho más fácil descansar durante la noche.Los científicos no definen aún si la pérdida o el aumento de peso están directamente relacionados con el hábito de cenar tarde.La cantidad de calorías de los carbohidratos, grasas y proteínas siempre es la misma. Esto significa que sólo por el hecho de comernos un pastel por la noche, el número de calorías que ingerimos no se duplica. El aumento de peso siempre va unido a un exceso de calorías. Entonces, cenar tarde no implica necesariamente ganar kilos.Al cenar muy tarde, puede ocurrir que sin darte cuenta consumas más calorías de las que necesitas a lo largo del día y que entres, de esta forma, en una situación de exceso calórico.Si el ritmo de nuestra vida cotidiana no nos permite cenar temprano, se recomienda cenar ligeramente y que la cena sea rica en proteínas, para lograr saciarnos sin sentir pesadez en el estómago.En cuaqluier caso, se recomienda acudir a un profesional médico. AH
