Sin sus renos, sería casi imposible que Santa Claus surcara el cielo y recorriera cada rincón del planeta en una sola noche.Para fortuna del gordito generoso en 1807 estos trabajadores animales hicieron su primera aparición en el poema de Navidad "A visit from St. Nicholas" del escritor inglés Clement Clarke Moore.En su poema, Clarke Moore describe a un Santa muy diferente a la imagen que tenemos en la actualidad. Este Santa era más bien un hombre delgado parecido a un gnomo que entraba por las chimeneas de los hogares a dejar regalos para los niños. Viajaba en un trineo que volaba y era jalado por ocho renos. Un sólo párrafo bastó para crear todo el mito sobre estos mágicos ayudantes."Más rápido que águilas sus corceles vinieron, y él silbó, y gritó, y los llamó por su nombre: "¡Ahora, Alegre! ¡Ahora, Bailarín! ¡Ahora, Bromista y Acróbata! ¡Vamos Cometa! ¡Vamos Cupido! ¡Vamos Relámpago y Trueno! ¡Para la parte superior de la terraza! ¡A la parte superior de la pared! ¡Ahora el tablero de distancia! ¡tablero de distancia! ¡tablero lejos de todo!".El nombre de los renos obedece a la principal característica que tiene cada uno de ellos y se dice que la idea de los ocho primeros renos pudo estar inspirada en la leyenda de la mitología escandinava sobre el dios Odín quien montaba un caballo de ocho patas de nombre Sleipnir.Sin embargo, hasta ese momento el ayudante más famoso de Santa Claus aún no hacía su aparición. Rodolfo, el reno de la nariz roja nació en otro cuento de Navidad en 1939, el escritor estadounidense Robert L. May dio a vida a este personaje en el cuento "Christmas Story".La historia cuenta cómo la manada se burlaba de Rodolfo por tener una nariz roja tan brillante que parecía una luz. Durante una Nochebuena se desató una gran tormenta de nieve que impedía al trineo de Santa avanzar para repartir los regalos así que decidió enviar hasta al frente al joven reno para que los guiara con su nariz. Fue así como Rodolfo logró ser el líder y se ganó el respeto de sus compañeros.Según la Sociedad Zoológica de Chicago, Trueno, Relámpago, Juguetón, Cupido, Cometa, Brioso, Bailarín, Acróbata y, por supuesto, el famoso Rodolfo—el de la nariz roja—son efectivamente hembras, ya que los renos machos pierden su cornamenta a comienzos de diciembre."Las hembras mantienen sus cuernos hasta el verano. Estos permanecen más tiempo para que puedan proteger a sus crías de los depredadores", explica la entidad en su sitio web."Los renos machos tienen su época de apareamiento en otoño, cuando usan sus cuernos para luchar, pero una vez que termina esa temporada los pierden", explicó Gerald Lincoln, profesor de la Universidad de Edimburgo, durante una entrevista para The Telegraph en 2009.Así como para Santa los renos son imprescindibles para poder recorrer el mundo en una noche, estos animales tienen una gran importancia para los pueblos del Ártico donde forman parte de las comunidades indígenas y realizan diversas labores que les permite a las personas mantenerse calientes y vinculados con el mundo.También conocidos como caribús, son mamíferos, forman parte de la familia de los ciervos, tienen un pelaje espeso y tupido que les ayuda a resistir las temperaturas bajo cero. Se encuentran en la zona ártica de Norteamérica, Noruega, Rusia y Suecia, viven en rebaños y cuando los grandes fríos los alcanzan hacen migraciones de hasta más de cinco mil kilómetros.Se alimentan de hierba, hongos y corteza de árboles, tienen un gran olfato para poder encontrar comida enterrada bajo gruesas capas de nieve de los lugares que habitan. Aunque son animales pacíficos en la época de apareamiento, entre septiembre y octubre, los machos tienen fuertes combates por el control de las hembras del territorio.Para diversas comunidades indígenas del Ártico los renos son animales fundamentales tanto para su vida diaria como para su cultura. Son su medio de transporte pero también su piel les sirve para construir sus chozas, además de abrigos. Consumen su carne y leche y con sus huesos pueden crear utensilios y herramientas de cocina.En la vida real, fuera de cuentos de Navidad y fantasía, estos animales son parte fundamental en la vida de muchas personas.jb