Siempre he sido un convencido que cuando las cosas se hacen bien y con pasión, se tiene éxito. Así es como La Betty May vive esta popularidad que hace que cada vez más comensales se integren a su clientela. Betty May es una cenaduría de corte sinaloense, aquí encontrarás todos los días tacos dorados, gorditas, tostadas y asado de res sinaloense; así como especiales que añaden al menú algunos días: martes, tamales de elote; miércoles, tamales estilo Sinaloa (de puerco); jueves, pozole y domingo, enchiladas.Yo acudí en jueves de pozole y pues no podíamos fallarle al especial del día. Tiene un terracita con un par de mesas y un pequeño salón con seis mesas solamente.Pozole ($125) no es el típico pozole blanco que conocemos, es estilo norteño, es rojo… Muy bueno. Y viene con un grano que ha sido hervido por largo tiempo junto con la cabeza entera de cerdo para obtener un gran sabor, aunque te sirven de entrada pura carnaza. Hace mucho que no probaba uno tan bueno, la verdad. ¡Me hizo acordarme de mi madre! La cocción larga hace que el grano le dé un espesor inusual a este platillo, dándole una textura muy apropiada para un caldo con tradición. Lo acompañan con cebolla, rábano, lechuga, limón y chile verde.Seguimos con unas buenas gorditas ($25) de tamaño mediano, las pides por unidad y tienen de carne, papa, requesón y frijol. Ordenamos dos, de carne y de papa. Las coronan con lechuga cortada fina en tiritas y unas rodajas de rábano. Te ofrecen una salsita dulce aparte, con la que las bañas a tu gusto. La masa de sabor muy natural y frita en su punto firme, pero sin ser duro. La de papa cuenta con un puré rústico en el que se sienten algunos tropiezos del tubérculo. La carne finamente deshebrada y con una porción que me pareció adecuada, pero no abundante.Por último quise probar el asado de res sinaloense ($120); es un platillo elaborado con cuete, esa pieza de res que cuecen y con la que obtienen un consomé que se elabora con una base de carne y papas, un poco de lechuga, pepino en medias lunas, zanahoria rallada, queso fresco espolvoreado y rodajas de aguacate.Fue una grata sorpresa este platillo, porque me pareció muy hogareño y tradicional. Este consomé al que luego quieres chopear con algo, aporta un gran sabor y las distintas texturas, son un deleite que pocas veces puedes disfrutar por tantas que son; así mismo, los sabores en las mismas aportan la nostalgia de una comida en casa; creo que esa es una de las razones por las que tienen tanta clientela.¡Sé feliz!