Hace apenas unos días el CEO de Ford, Jim Farley, determinó que la compañía que dirige tenía muy claro el enfoque de sus productos, siempre orientados a los entusiastas y dejando de lado las opciones “aburridas” sobre ruedas.Si bien, todavía falta para lograr eso, durante el evento de Ford Performance 2024 la marca nos deja en claro que va en buen camino, pues al disfrutar la gama de deportivos en pista y terracería, creemos que la visión de Farley parece alcanzable.Desde la entrada a la pista de México Drive Resort, uno se puede percatarse cómo una marca como Ford, con una gama que inicia desde los 600 mil pesos, tiene cabida dentro del Top 10 de ventas a nivel nacional, pues la mayoría de sus modelos son altamente deseables.No sólo tuvimos la oportunidad de conducir un Mustang GT con caja manual, por las curvas del trazado del Estado de México; sino que también estaban presentes modelos como la Mach-E, el modelo conmemorativo del 60 aniversario y la Explorer ST 2025, que sorprende por su aplomo en las curvas (a manos de un piloto experto), con cuatro pasajeros.Además, la celebración de los modelos deportivos de Ford estuvo aderezada por la presencia de Sergio “Checo” Pérez, piloto mexicano en el equipo de Red Bull F1, que, a partir de 2026, iniciará una alianza con Ford, para regresar a lo más alto del automovilismo.Claro que, para completar la experiencia, un trazado de terracería con múltiples obstáculos, nos permitió experimentar de nueva cuenta la gama de modelos Raptor, con Ranger, Bronco y Lobo Raptor R, listas para sortear un trazado muy divertido que incluía un pequeño salto que demuestra sus capacidades y hasta su comodidad al circular por estos terrenos.Asimismo, una variante Rally de Mustang Mach-E hizo unas pasadas de demostración, para dejarnos claro su potencial eléctrico en terracería.Sin embargo, no fue la presencia de “Checo” haciendo donas en un Mustang Dark Horse a media pista, sino ver en persona al Mustang GTD, el modelo más radical del pony car que, poco tiene que ver con sus “hermanos de establo”.Se trata de un vehículo de carreras con carrocería ensanchada de fibra de carbono, suspensión compleja de balancín y bieletas de enlace integral en la parte trasera y frenos Brembo con llantas de 345 mm en el eje posterior, y aerodinámica activa, basado en un modelo GT3 que compitió en las 24 horas de Le Mans, que puede circular en la calle.Como buen modelo, realmente especial, para adquirirlo, no sólo falta contar con los más de 6.2 millones de pesos que pedirá Ford por un ejemplar, sino que hay que mandar una solicitud, determinar si uno puede ser digno de contar con un vehículo con su V8 de 815 HP y alma de carreras.Diego Briseño - CDMX
