El té de ruda es una tradición ancestral que muchos practican cada primero de agosto como parte de los rituales dedicados a la Pachamama. Sin embargo, su consumo puede estar contraindicado en ciertos casos debido a sus posibles efectos secundarios. El consumo de té de ruda no se recomienda en los siguientes casos: - Niños: Puede causar malestar estomacal, vómitos, distensión abdominal y contracciones intestinales debido a su alta concentración de sustancias activas. - Mujeres embarazadas: Su ingesta puede aumentar las contracciones uterinas, lo que podría representar un riesgo para el embarazo. - Personas con problemas renales o hepáticos: La ruda puede agravar estas condiciones debido a su impacto en los órganos internos. - Mujeres lactantes: Aunque menos documentado, se aconseja evitarlo por precaución. Esta tradición se remonta a las comunidades originarias de América, particularmente la cultura guaraní, que atribuía a la ruda propiedades medicinales para enfrentar enfermedades y epidemias, especialmente durante agosto, un mes históricamente asociado con heladas y lluvias intensas. El ritual consiste en tomar tres sorbos de té de ruda: El té de ruda, en cantidades moderadas, no debería generar problemas en adultos sanos. Sin embargo, se advierte que un té muy concentrado puede causar dolores abdominales tipo cólico, gastritis o incluso acidosis metabólica, especialmente en bebés y niños, quienes tienen menor capacidad de metabolizar sus componentes. Cuando se consume de manera adecuada, el té de ruda puede ofrecer múltiples beneficios, como: Para aprovechar sus beneficios sin riesgos: 1. Usa agua fresca de buena calidad. 2. Evita hervir la ruda por mucho tiempo para no perder sus propiedades. 3. Consume el té caliente o tibio. 4. Endulza con miel, limón o un edulcorante natural, según prefieras. Aunque el té de ruda es parte de una tradición cultural y medicinal, es importante consumirlo con moderación y consultar a un médico en caso de dudas o condiciones de salud específicas. EE