La diabetes tipo 2 es una condición crónica que altera la forma en que el cuerpo maneja el azúcar en sangre, conocido como glucosa. Aunque esta enfermedad no tiene cura definitiva, es posible prevenir y reducir sus efectos con precauciones adecuadas y una alimentación equilibrada.La glucosa, obtenida de los alimentos que ingerimos, es la principal fuente de energía del cuerpo. En personas con diabetes tipo 2, el cuerpo no produce suficiente insulina, la hormona necesaria para facilitar la entrada de glucosa en las células. Además, las células pueden desarrollar resistencia a la insulina, incluso si esta hormona está presente.Aunque la diabetes no puede curarse completamente, existen múltiples enfoques para manejar sus efectos y síntomas. Una dieta adecuada, junto con cambios en el estilo de vida, puede prevenir su aparición y mejorar el estado general de salud.Para controlar los síntomas de la diabetes tipo 2, los especialistas sugieren adoptar las siguientes prácticas:En algunos casos, también se requiere la toma de medicamentos específicos para controlar la enfermedad.El ejercicio físico regular es crucial para el manejo de los niveles de glucosa en sangre. Actividades como caminar, ya sea de alta intensidad o de bajo impacto, son particularmente beneficiosas. Según un estudio realizado por el Hospital Clinic-IDIBAPS de Barcelona y el CIBERDERM, el momento en que se realiza el ejercicio también puede afectar los resultados.El horario ideal para caminar y regular la glucosa es justo después de las comidas. Realizar una caminata ligera tras cada comida puede ser especialmente beneficioso para la salud, ayudando a mantener los niveles de azúcar en sangre bajo control.Con información del Hospital Clinic-IDIBAPS de Barcelona y el CIBERDERMBB
