En el mapa podrá parecer pequeño, pero al recorrerlo descubriremos que Colima es inmenso. Nuestro vecino tiene en su geografía montañas espectaculares, ciudades encantadoras y playas que te robarán el corazón. A lo anterior -que no es poco- se suma una gastronomía exquisita y una rica propuesta cultural.Manzanillo, Colima capital y Comala son las apuestas usuales con las que conquista a los viajeros. Cada uno con sus propias características, aunque comparten la virtud de que son destinos perfectos para viajes cortos.Pero hay un premio para aquellos que deciden escaparse de las rutas usuales. Esos que se partan del sendero “de lo de siempre” y juegan con las posibilidades, las emociones y la experiencia de lo que es diferente.Recuerda verificar las condiciones sanitarias de los destinos que quiere conocer. Los atractivos que aquí te recomendamos están disponibles a lo largo de todo el año, lo que te permitirá planear tu aventura con calma.Amor por la naturalezaEl amanecer pinta el lienzo celeste de colores espectaculares cuando lo recibes observando el Volcán de Colima. Este colosal monumento natural ha servido de inspiración por generaciones para poetas, pintores, fotógrafos y ahora instagramers (si le tomas foto, no olvides colocar la etiqueta #FotoInformador).La oferta natural siempre es generosa. Destaca por ejemplo la cascada de El Salto de Minatitlán, a una hora de Manzanillo y que brinda, especialmente en época de lluvias, unas vistas espectaculares, con el vital líquido abriéndose paso con furia entre los cuerpos rocosos.Para quienes busquen una experiencia familiar, vale la pena darse una vuelta por el centro turístico Laguna la María (camino a la Yerbabuena km 1.5). Lo que fue una caldera volcánica ahora es una laguna en cuyos alrededores disfrutarás, además del cuerpo de agua, de cabañas, senderismo, camping, cancha de futbol, juegos infantiles y restaurante. En su página de internet (https://www.lagunalamaria.com/) encuentras indicaciones de cómo llegar, disponibilidad y recomendaciones sanitarias.Manzanillo con su arena oscura y olas suaves ha sido desde siempre un imán para los viajeros. Pero hay otras playas de encanto irresistible para descubrir. Una de las más famosas se encuentra a 13 kilómetros de Tecomán: Boca de Pascuales.Esta playa, donde desemboca el Río Armería, es famosa entre los amantes del surf, por su oleaje bravo y aguas profundas. Para los que carecemos del equilibrio necesario para subirnos a la tabla sin caer cual piñata en fiesta infantil, Boca de Pascualeses perfecta para tomar un buen bronceado rodeado por la más impoluta naturaleza.Para llegar, saliendo desde Colima capital toma el camino a Tecomán por la carretera federal 200 y desde allí la desviación a Boca de Pascuales.Muy cerca se encuentra Cuyutlán, donde encontrarás varios desarrollos turísticos, centros para relajarte y buenos restaurantes. Es célebre en la historia por dos razones: Aquí rodaron películas Emilio “El Indio” Fernández y Alberto Isaac.La segunda es porque el 22 de junio de 1932 una gigantesca ola de 20 metros devastó la playa y destruyó buena parte del pueblo. Daría paso a la leyenda de “La ola verde”, una leyenda que siguen contando los lugareños, quienes afirman que en ciertos meses del año, el mar ofrece esa tonalidad.Desayunar en Colima es darse un festín de sabores. Sabores con un toque cítrico, suave condimentado y vastas porciones son características usuales que podrás disfrutar en la mesa cuando asistas a esta Entidad.Por la mañana son infaltables chilaquiles colimotes con su guarnición de frijoles, generosamente gratinados con queso y acompañados por un café de olla. ¡Nada más de leerlo se antoja!A la hora de la comida o la cena, los sopitos son compañeros infaltables para darle “matarile” al hambre. Al ser un Estado costero, sus mariscos también son una maravilla, destacando los camarones en diversas presentaciones, el aguachile, el pulpo tatemado y los cocteles.JL