Aunque no estemos activos, nuestro cuerpo sigue trabajando para mantener funciones vitales como la respiración, circulación, digestión y reparación celular, lo cual consume energía. Al dormir recargamos nuestra energía y mantenemos nuestro cuerpo en buen estado de salud y sorprendentemente, también se queman calorías.Esta quema mínima de calorías durante el descanso es parte de nuestra Tasa Metabólica Basal (TMB), que es la cantidad de energía necesaria para que el cuerpo realice estas funciones básicas en reposo.Según Alex Rothstein, coordinador del programa de ciencias del ejercicio en el Instituto de Tecnología de Nueva York, la TMB representa la energía mínima requerida para que nuestro organismo se mantenga activo a nivel fisiológico, incluso mientras dormimos.Aunque no se compara con las calorías que quemarías al hacer ejercicio, el hecho de dormir bien, al menos siete horas por noche, contribuye a nuestro gasto calórico diario. De acuerdo con la Escuela de Medicina de Harvard, mientras dormimos, quemamos entre 40 y 55 calorías por hora, lo cual suma entre 280 y 385 calorías en una noche de sueño reparador de siete horas.Cabe destacar que este número varía según cada persona. Factores como el peso, la cantidad de masa muscular, la actividad física diaria y la calidad del sueño influyen en la TMB, al igual que el uso de ciertos medicamentos que pueden afectar el metabolismo.Cualquier hábito que aumente tu tasa metabólica basal también incrementa las calorías que quemas en reposo. Por ejemplo, tener más masa muscular incrementa la quema de calorías, ya que el músculo consume más energía en reposo. Llevar una rutina de ejercicios también puede mejorar la calidad del sueño, lo cual a su vez puede aumentar el gasto calórico nocturno. Dormir al menos siete horas cada noche y asegurarte de que sea un sueño profundo también favorece este proceso.Establece un horario: Acuéstate y despiértate a la misma hora cada día, incluidos los fines de semana.Crea una rutina de relajación: Lee, medita o escucha música relajante antes de acostarte para desconectar.Evita las pantallas: Apaga dispositivos electrónicos y evita el uso del celular, ya que la luz azul de las pantallas puede dificultar el sueño.Optimiza tu espacio: Mantén la habitación fresca, oscura y cómoda. Una temperatura de 67 grados Fahrenheit es ideal, y asegúrate de tener una cama cómoda y sábanas suaves.Limita el alcohol y la cafeína: Estas sustancias pueden interrumpir el sueño, así que intenta no consumirlas horas antes de dormir.Evita comer tarde: Trata de no comer al menos tres horas antes de dormir para no afectar la calidad de tu descanso.Dormir bien, además de ayudar a la quema calorías durante la noche, también mejora el metabolismo y ayuda a controlar el apetito durante el día, promoviendo elecciones alimenticias más saludables. La falta de sueño puede llevar a un aumento en el hambre y en la preferencia por alimentos más calóricos, lo que podría dificultar el mantenimiento de un peso saludable.*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApphttps://whatsapp.com/channel/0029VaAf9Pu9hXF1EJ561i03 AF